¿Cuál es el precio de ser una top blogger? Algunas en Estados Unidos están dispuestas a lo que sea por llegar a serlo, como leísteis el otro día en el post de Natxo. Es curioso lo alejados que estamos del mundo blogger americano. Ellos nos llevan varios años de ventaja en todo el asunto de los blogs de moda, para empezar porque tienen perfectamente regulado por ley la manera en que los bloggers deben informar de todas las colaboraciones que hacen, de los regalos y los ingresos que reciben para hablar de cada producto. Y aquí todavía estamos en pañales en este asunto.
En España, bajo sospecha
Hay bloggers que triunfan a nivel internacional, que viajan a lo largo y ancho de todo el mundo, que colaboran con grandes marcas como Louis Vuitton o Loewe, y se pasan el día de shooting, viajando a las semanas de la moda de cualquier punto de la tierra, en las fiestas más exclusivas, recibiendo regalos. Toda una vida de ensueño si eres una apasionada de la moda.
Hay muchas otras que son conocidas a nivel nacional, que han conseguido que su profesión sea “ser blogger de moda“ a base de colaborar con numerosas marcas, aunque la mayoría de las veces no lo indican de manera explícita en el blog.
Debemos deducirlo de la insistencia en mencionar y en citar las bondades de determinada marca, y en la forma en que enlazan a cada producto de la firma, que aparece de manera repetitiva en su blog. Hasta el punto de que no sabes ya si el estilo que lucen a diario es el suyo propio o el que las marcas y las colaboraciones les han impuesto. Y cuando citan “sus favoritos del mes“ o “sus adquisiciones de la semana“ no sabes si son reales o aparecen allí por algún motivo oculto.
No merece la pena citar nombres porque todos sabemos de quienes estamos hablando. Y tampoco se salvan algunas egobloggers famosas con su blog alojado en las webs de las principales revistas de moda del país. Un negocio redondo para la famosa, para la revista y para las marcas, que ven cómo lo que sale en el blog del personaje X se vende como churros.
El caso americano, el precio de la vanidad
Y mientras en España todavía no se deja nada claro, en Estados Unidos han llegado al extremo contrario. En el Fashionista comentan cómo algunas bloggers finjen que han recibido regalos de determinadas marcas para aparentar un status de tops bloggers que no poseen. Es decir, compran de su propio bolsillo el bolso en cuestión y luego dicen que se lo han regalado. En el Fashionista citan testimonios de ejecutivos de la industria y lo comparan con auto enviarte flores el día de San Valentín. Y llegan a comparar a las top bloggers con las estrellas de Hollywood.
En el caso de España, la vanidad no queda más allá de comprar algo para hacer un sorteo con el que comprar seguidores o de querer lucir cada día un modelito distinto a base de comprar todas las novedades de la marca low cost de turno y de devolver la ropa tras la sesión de fotos.
Pero si quieres estar entre las mejores, tienes que lucir las mejores marcas. Es duro situarse en el top de las bloggers y para ello hay que lucir marcas de lujo, el bolso más exclusivo, la marca de zapatos más deseada o, al menos, aparentar que las llevas. Y todo con dinero de su propio bolsillo. Hasta ahí llega la pasión por tuitear, instragramear y contar tu vida diaria en el blog. ¿Es todo por querer recibir regalos o dinero por tu blog? ¿O es una simple cuestión de vanidad?
¿Llegaremos aquí a esos extremos? No me extrañaría nada, porque todos sabemos que España es el país de la envidia, y despertar en tus lectores ese oscuro sentimiento engancha a la audiencia y hace que determinado blog sea considerado como importante. Lo mismo que acudir a determinados eventos, recibir invitaciones a fiestas de las marcas y sacarse la foto en ciertas presentaciones o actos. Hay peleas por ser invitada y salir en la foto.
Vía | Fashionista
Fotos | The blonde salade
En Trendencias | Bloggers que se compran un bolso y dicen que es regalado, el juego de las apariencias VIP
En Trendencias | Mango gusta tanto a bloggers como a celebrities, ¿qué pasó durante el desfile?
Ver 38 comentarios