Ni Anna de lo Russo, ni Emmanuelle Alt, ni otra voguette al respecto. Consternado se ha quedado el mundo de la moda. Hace tan sólo una semana descubríamos que la fantástica Carine Roitfeld, editora del Vogue París (para mí la mejor cabecera de todos los Vogue del mundo) decía adiós tras 10 años de estar al frente, siendo una referencia y una institución en el mundo de la moda.
Pero todo lo bueno tiene un final, y su carrera decía adiós de la manera más sorprendente. Según sus propias palabras en el canal WWD en la noticia que mi compañera Andrea nos adelantaba hace unos días con la verdad sobre su salida, la propia Carine declaraba abiertamente:
Cuando publicamos el 90 aniversario, fue como un doble aniversario para mí, sabía que era el último. Siempre he sido freelance así que cuando fui contratada hace 10 años, encontré muchas dificultades en adaptarme a un horario, una oficina, vacaciones fijas…ha sido una aventura increíble pero en mi corazón y alma soy más una freelance.
Y ha sido en el mismo canal donde anoche el propio diseñador dio la exclusiva:
Hace unos meses Carine y yo protagonizamos un reportaje fotográfico con Crystal Renn como protagonista. Hasta ese momento no sabía que esto de la dirección y el editorial fuera conmigo. Los directivos quedaron tan contentos que me propusieron sustituir a mi gran amiga Carine. Intentaré defender mi mandato lo mejor posible, a pesar de que no dejaré que esto influya en mis colecciones.
Así que ya lo véis, el diseñador/director de cine/fotógrafo/modelo ahora suma otra responsabilidad y habilidad más a su Currículum Vitae: editor de una de las cabeceras más importantes del mundo.
El The Times y el Post ya se han hecho eco de la noticia, y hoy presentaban en sus portadas está bomba informativa. Parece que las noticias vuelan y se corre como la pólvora… Esperemos que sus editoriales y la dirección bajo el mando del gran Ford no tome la línea de su último editorial. En la última cabecera de la edición francesa, Tom Ford era uno de los protagonistas. ¿es posible que tuvieramos la solución delante todo este tiempo y nosotros sin darnos cuenta? ¡Mondieur!
Ya estoy ansiosa de ver el primer número bajo la supervisión de este señor, que parece que todo lo que toca lo convierte en oro. Sin duda alguna, se agotará en pocos días, y yo seré una de ellas en correr al kiosko a comprar el ejemplar: será histórico. ¿Qué otra carrera le falta por probar a este Dios de la moda?
Obviamente se trata de una inocentada. ¡Ya nos gustaría nosotras que fuera verdad! Feliz día de los inocentes, ¿qué inocentadas os hicieron?
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