Somos muchos los que relacionamos las vacaciones de verano con el mar y la playa (por suerte, en España tenemos cinco de las mejores playas de Europa), pero no todas vivimos cerca de la costa... No obstante, hay una alternativa tan maravillosa como son las piscinas naturales, que nos permiten a todos darnos un buen capuzón rodeados de naturaleza. Para ello, hemos elaboramos un listado con las piscinas naturales que podrían convertirse en tu lugar favorito durante los meses de calor.
Cueva del Gato (Málaga)
El Pantera
La primera parada la hacemos en la Costa del Sol. Más concretamente, en la Cueva del Gato, que está situada en el parque Natural de la Sierra de Grazalema. Se trata de una piscina natural que presenta aguas cristalinas y una llamativa cascada. Además, si te decides por viajar por la zona, también puedes visitar Almuñécar y otros de los pueblos con más encantos de la sierra andaluza.
Fuentes de Algar (Alicante)
calafellvalo
Nos trasladamos ahora a la Comunidad Valenciana porque es cerca de Benidorm, en Callosa d’en Sarrià, donde se encuentran estas espectaculares piscinas naturales de agua fría. Eso sí, en esta ocasión, se necesita adquirir una entrada para poder visitarlas. Para los adultos cuesta cinco euros en temporada alta y la de los niños (de cuatro a diez años), solo dos euros. En la web se pueden encontrar todos los detalles. Por cierto, la Cala Moraig también es siempre un acierto si estás por la zona y tienes tiempo.
Piscinas de Bolbaite (Valencia)
Joan Costa
No abandonamos la Comunidad Valenciana, pero nos trasladamos al pueblo de Bolbaite, donde el río Sellent se ensancha para convertirse en un maravilloso lago. De nuevo, estamos ante una atracción natural pero que requiere de entrada. El ticket genera cuesta tres euros y los menores de cinco años entran gratis. Aquí puedes encontrar más información.
Chorreras de Cabriel (Cuenca)
José Saíz Valero
Viajamos al interior para detenernos en los pueblos de Enguídanos y Villora el río Cabriel. Es entre ambos puntos donde se ubica una piscina repleta de cascadas y saltos de agua y se producen pozas naturales para bañarse en perfecta armonía con la naturaleza. Y, ya que estás, te recomendamos que te dejes caer por Cuenca capital, que es preciosa.
Piscinas de Arenas de San Pedro (Ávila)
Jesús Pérez Pacheco
Para ir en familia y estar tranquilos, estas piscinas naturales situadas junto al cauce del río Arenal ofrecen dos opciones: una piscina con alrededor de dos metros de fondo y un trampolín, y otra que es apta para los niños.
Chorro de Navafría (Segovia)
Jacinta Lluch Valero
En la popular sierra de Guadarrama se esconde un bosque de pinos coronado por una zona de piscinas naturales. Además de por la belleza del paisaje natural, es un lugar perfecto para ir a pasar el día porque hay mesas, barbacoas, un parque de juegos e incluso aseos.
Pozas de Mougás (Pontevedra)
José Antonio Gil Martínez
Pontevedra esconde un millón de rincones preciosos. Solo tenemos que recorda la belleza de O Grove y los mil planes al aire libre que ofrece. Además, tenemos las Pozas de Mougás, que son otra prueba de la imponente naturaleza de Galicia. De hecho, en la sierra de Groba hay varias piscinas naturales con cascadas, grandes rocas y aguas cristalinas.
Gorg Blau de Sant Aniol d'Aguja (Girona)
Carlos Alcántara Oliva
Como broche de oro, nos detenemos en la zona de Alta Garrotxa. Concretamente, hacemos una preciosa parada en el pueblo de Sadernes. Allí podemos pasar el día en una piscina natural de las que te hacen sentir como en el paraíso. Si vas a pasar varias jornadas por Girona, te aconsejamos también que pasees por la bella Calella de Palafrugell.
Foto de portada | Modes Rodríguez
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