El flequillo se ha instalado en muchas cabezas desde hace un par de años. Lo que parecía ser una tendencia pasajera se ha convertido en todo un referente en lo que a peinados se refiere. Pero ojo, no a todo el mundo le favorece, hay que tener en cuenta unos cuantos consejos antes de dar el paso, de lo contrario corres el serio peligro de convertirte en una seta andante.
Si tienes unos ojos grandes y expresivos es mejor que no utilices un flequillo excesivamente largo, ¡tienes que lucir esos ojos!.
Los flequillos rectos suelen ser apropiados solamente para personas que tienen el rostro muy alargado y estrecho o para frentes muy anchas. Si tienes la cara redonda o una frente estrechita busca otra alternativa, un flequillo largo hacia un lado por ejemplo.
Si tienes una piel grasa, debes tener en cuenta que el roce del flequillo con la frente hará que se produzca una mayor cantidad de grasa en esa zona, con la posible aparición de granitos.
Es conveniente retocarlo cada 6 semanas, para ello hazlo siempre con el pelo mojado.
Si tienes un flequillo rebelde utiliza serum o cera.
No abuses de las planchas para moldear el flequillo ya que es una zona que está más expuesta que el resto al sol, humedad y viento y la podrías castigar en exceso.
