Es una de las mujeres más nombradas en los últimos días. Kate Middleton, de nuevo en casa tras someterse a una misteriosa operación, ocupa los titulares de todo el mundo. Su estado de salud ha despertado un imparable interés mediático y, por el momento, pocos detalles se conocen: Kate está en recuperación y retomará su agenda cuando pueda hacerlo.
Nadie sabé cómo ni por qué operaron a Kate. Se habló de una "histerectomía" que pudo complicarse en quirófano, pero ninguna confirmación hay desde palacio. La única aclaración que hicieron fue para asegurar que no se trataba de un cáncer. Carlos III, en cambio, sí padece esta temida enfermedad. Ya está en tratamiento y se encuentra ahora junto a Middleton, que se ha desplazado con Guillermo y los niños hasta Sandringham para tomar aire.
Middleton y su suegro necesitan calma y sosiego. Ella para recuperar su agenda lo antes posible y él con un claro objetivo: superar el cáncer. El tiempo dirá si el tratamiento es efectivo y cuánto tardará el rey en reponerse. En cualquier caso, seguirá atendiendo sus funciones en la medida en que pueda hacerlo. Las obligaciones no se han esfumado y tanto el monarca como Kate deben cumplirlas.
Y entre dichas responsabilidades, se encuentran una serie de curiosas normas impuestas desde Casa Real. Entre las más sorprendentes, se encuentra la prohibición del Monopoly. Ni siquiera ahora que Middleton y Carlos III tienen tiempo para relajarse pueden jugar. Al parecer, el Príncipe Andrew lo consideró "un juego conflictivo", tal y como publica El Español.
Pero no es la única prohibición llamativa. Kate tampoo puede utilizar faldas demasiado cortas ni pintar sus uñas con colores llamativos. Tampoco tiene permitido mostrarse cariñosa en público con los distintos miembros de la familia, aunque ha hecho excepciones con sus hijos.
A la hora de la compra, Middleton debe ir siempre acompañada por el personal de seguridad. En la mayoría de ocasiones, es preferible que alguien haga estos recados por ella para evitar riesgos. Por el mismo motivo, Kate (y el resto de miembros 'reales') no pueden firmar autógrafos. Sería peligroso que alguien pudiera falsificar la firma.
Si hablamos de comida, también existen restricciones. La Familia Real nunca come mariscos ni pescados. "Seguramente se haya establecido esta norma para evitar intoxicaciones", explican desde el citado medio. En lo que respecta a Middleton, ella nunca come carbohidratos por la noche.
Fotos | Gtres
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