Tenemos el gran honor de entrevistar a Gonzalo Fonseca, un diseñador que creó la firma de complementos Steve Mono en 2007 primero para hombres y después ha crecido hasta fabricar para mujeres y vender internacionalmente en lugares como Opening Ceremony de Tokyo. En cuanto conozcas un poco más de la filosofía de la firma y veas la colección de bolsos seguro que te enamoras de ella tanto como yo.
¿Por qué lanzaste tu negocio en el mundo de los complementos?
Quería empezar por algo pequeño y siempre me habían gustado los bolsos clásicos, pensando en un producto de calidad y esencial para todos los días. Mi formación es en Diseño Gráfico enfocado al mundo de la moda, y en las ferias de moda a las que tuve la oportunidad de asistir vi que había un nicho interesante partiendo de un producto que es el que me gusta a mi y el que yo llevaría.
Después de empezar vendiendo sólo para hombres, decidiste vender bolsos también para mujeres ¿a qué se debe?
Las mujeres que conocían la firma nos demandaban estos diseños, aunque muchas veces compraban los bolsos y complementos de hombres para ellas. Hoy en día, la producción es mayor para mujeres porque se nota que os gusta más variar de bolso y el mercado es más amplio.
¿Hay muchas diferencias entre los productos de hombre y los productos para mujeres?
Aunque son productos bastante unisex, lo cierto que en los bolsos de las mujeres nos permitimos más licencias a la hora de cambiar los cierres, las asas y los colores, pero siempre manteniendo el concepto de producción en piel artesanal. Vendemos a una clientela madura que sabe lo que quiere.
¿Qué tiene Steve Mono diferente a otras marcas?
Somos antitendencias y antitemporadas. Hacemos productos con carácter atemporal, sin seguir el juego de las temporadas y de las tendencias, pero siempre manteniéndonos modernos en el diseño. Fabricamos el 100% de la producción en piel y absolutamente todo está hecho en España con los mejores artesanos.
Tratándose de piezas tan atemporales, ¿cómo planteas cada nueva colección?
Viajando y conociendo nuevos artesanos en pequeños talleres que trabajan con mucha calidad, buscando el producto exclusivo para nosotros y conociendo qué es lo que nos demandan los clientes, que son muy fieles, y así actualizamos conceptos esenciales que siempre nos han gustado. Son productos especiales y contemporáneos que quieres llevar no sólo una temporada. Todas las temporadas sacamos nuestras piezas clásicas, nuestros mayores éxitos de ventas y vamos incorporando algunos bolsos nuevos con colores, tejidos y diseños renovados.
Estáis en algunos puntos de venta tan significativos como Opening Ceremony en Tokyo ¿cómo es vender allí?
Hay ciertos puntos de venta que nos sirven como escaparate o ventana para poder vender en otros sitios y darnos a conocer. Así somos muy conocidos en sitio como Corea.
Vuestro principal mercado es Asia, sobre todo Japón ¿qué te gusta de vender allí? ¿cómo valoran los asiáticos vuestro producto?
Los japoneses valoran mucho el Made in Spain. Saben que en lugares como Ubrique se fabrica para las grandes marcas de lujo y conocen el excelente trabajo manual que llevan los bolsos. También son muy estéticos, les tiene que entrar el producto por los ojos y pos supuesto, tienes que encajarles en precios. Además, es un placer trabajar con ellos porque son tremendamente respetuosos en el trato entre cliente y vendedor, en un trato de igual a igual. No importa que seas una marca pequeña, porque te tratan con el mismo respeto y la misma educación.
Al venir del mundo del diseño masculino, seguro que tienes un punto de vista diferente sobre el estilo de las mujeres, ¿qué es para ti una mujer elegante?
Sobre todo, que no se disfrace. A una mujer elegante se le nota a lo lejos y no hace falta que lleve nada especial. Hay que ser fiel a uno mismo, y ésto es válido tanto para hombres como para mujeres. Tienes que saber llevar la ropa, no que la ropa te lleve a ti.
¿Qué recomendaciones darías a un diseñador que acaba de empezar con su negocio de moda?
Resulta imposible seguir el ritmo de las colecciones y precolecciones de las grandes firmas, así que hay que centrarse en tu producto, conocer tus clientes y ofrecer una calidad que no encuentras en las firmas low cost. Tienes que buscar en qué te vas a desmarcar de esas tiendas, buscando tu propia estrategia, y siendo honesto y real con lo que haces. Vender fuera cuesta lo mismo que vender aquí a nivel de trabajo, así que lanzarse al mercado internacional puede ser la mejor solución a la crisis del mercado local. No hace falta empezar a lo grande, puedes ir poco a poco, creciendo o manteniendo una producción reducida, creando piezas con vocación de permanencia.
Agradecemos a Gonzalo por compartir con nosotros su particular manera de entender la moda y el mundo de los complementos, da gusto hablar con alguien que tiene las cosas tan claras. Si queréis visitar su taller y tienda lo podéis hacer en el madrileño barrio de Malasaña, en la calle Don Felipe nº 10.
Sitio oficial | Steve mono
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