En ocasiones, los niños nos dan lecciones de solidaridad que demuestran que su empatía puede superar a la de los adultos. El último caso que hemos conocido es el de Armani Crews, una niña que les pidió a sus padres hacer algo muy especial con ocasión de su sexto cumpleaños: cambiar su fiesta y sus regalos por una jornada ayudando a las personas sin hogar de su ciudad, Chicago.
Artesha Crews, la madre de Armani, ha confesado a ABC News que siempre pensó que su hija bromeaba, en los meses que pasó diciendo que querría alimentar a las personas más desfavorecidas. Cuando, finalmente, se ofrecieron a llevarles algo de comida, la niña insistió en que no era eso lo que buscaba. «Quiero lo mismo que tendría en mi fiesta de cumpleaños».
La familia se puso manos a la obra, no sin antes advertir a la niña de que el presupuesto para lo que pretendía hacer la dejaría sin regalo de cumpleaños. Ella aceptó, y los Crews gastaron alrededor de 300 dólares (unos 281 euros) en comida y agua. Además, la comunidad de la iglesia local decidió unirse a la iniciativa entregando packs de productos sanitarios.
Después de comprobar el éxito de la iniciativa y de que ya planeen próximas campañas para ayudar a más gente, la niña solo declaró: «Es agradable ser agradable».
Imágenes | Facebook.
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