Las próximas elecciones en Estados Unidos están acelerando determinados movimientos, que cierta parte de la industria del comercio llevaba tiempo pidiendo. Barack Obama ha firmado el pasado 19 de enero la aceleración de los visados para ciudadanos chinos y brasileños.
La idea es acortar el proceso de solicitud de visado de cuatro meses y tres semanas. Esto significa que las capacidades del país para la tramitación de visados tendrán que aumentar hasta en un 40 por ciento en los próximos 12 meses.
La noticia está desatando una especie de pasión por estas latitudes. El CEO de Bloomingdales, Michael Gould afirmó esperar un alza enorme en el crecimiento de sus ventas. Saks y Macy's están en la misma línea, sobre todo porque veían como las capitales europeas empezaban a quedarse con esa cuota de mercado internacional de la que ellos ahora también disponen.
Ir a Paris puede demorar unos cuatro días mientras se espera el visado; cuatro meses para visitar Nueva York. La diferencia ha sido notable, y si bien desde el 11 de septiembre la seguridad se reforzó, casi en la misma línea el consumo internacional se redujo.
El valor del dólar atrae a turistas de países emergentes como Brasil, China e India. A medida que estas economías crecen, los turistas de las regiones también se incrementan. Y los minoristas de lujo no hacen sino incrementar la búsqueda de perfiles en sus tiendas con estos idiomas. El japonés y el español son muy demandados. No sólo para minoristas, las ventas de vivienda exclusivas, segundas residencias en el extranjero, han empezado a subir.
Algunas fuentes dicen que un aumento en el turismo podría dar lugar a 1,3 millones de puestos de trabajo y unos ingresos de 850 mil millones de dólares para la economía estadounidense.
Vía | Elite Choice En Embelezzia | Noticias del Sector