Ahora que (por fin) ha vuelto 'La Casa de Papel' y con ella, nuestro personaje favorito de la serie de Netflix, Tokio, nos hemos parado a pensar en el estilo de Ursula Corberó. La actriz española siempre fue una de nuestras favoritas, desde aquella época en la que interpretaba a Ruth en 'Física o Química' (aquella sería que todo millennial español vio durante su adolescencia). Pero es verdad que ha sido últimamente, con su papel de 'La casa de papel' en las pantallas, cuando nos ha deslumbrado con su buen hacer estilísticamente hablando. El cambio es digno de analizar, porque es de los más wow que hemos visto.
Ursula llegó a nuestras vidas en 2008 como "la guapa de Física o Química". La catalana lucía mechas rubias, pelo a capas, flequillo con raya al lado y se caracterizaba por llevar un look entre preppy y atrevido que nos gustaba a todas.
Después de esta etapa de rubia, vino una muy mítica: la de flequillo recto. En ella Ursula endureció su look, mostrándose más rebelde.
En 2012 decidió volver progresivamente a su color de pelo natural y apostaba por las ondas suaves. En cuanto a su estilo, se volvió más rockero.
En 2013 con el pelo más largo aún y un look lleno de brillos.
A finales del mismo año se puso aún más morena y empezó a recurrir a estilismos más oscuros.
Pero en 2014 decidió volver a su look de niña buena.
Y en 2015 nos maravilló con esta elección estilística demostrando que ya no era una niña.
A partir de este momento se cortó el pelo a capas y no brindó varios buenos looks estilo working girl que aún hoy se podrían llevar perfectamente.
En photocall, estaba más guapa y elegante que nunca.
Pero fue en 2016, con este maravilloso vestido de Teresa Helbig con raja en la pierna cuento percibimos que brilló especialmente. Su peinado (vuelve a recurrir al flequillo) y su maquillaje, le sientan de maravilla.
A partir de ese momento, la actriz empezó a acortar su pelo continuando con el flequillo y a elegir piezas de vestimenta mucho más trendy como este vestido con cortes cut out.
O este look con crop top, bomber y cinturón cowboy.
Posteriormente pasó a un rubio anaranjado que le duró muy poco, pero no le quedaba nada mal. Con la elección de este vestido negro brocado de Dolce&Gabbana con botones y reminiscencias retro nos ganó.
Y en 2017, con la serie '¿Qué fue de Jorge Sanz?', Ursula apareció con un peinado mucho más pulido y un flequillo más exagerado dejando ver una parte de la frente. En cuanto al estilo, siguió manteniendo esta estética cuidada y trendy que había demostrado en sus últimas apariciones.
Y llegó la etapa de 'La casa de papel' (2017), que fue cuando la actriz dejó fluir todo su esplendor y demostró tener mucho estilo. Su peinado, maquillaje, vestidos y complementos son de diez. Muy minimal pero con toques rompedores acertados.
Ursula había aprendido a desarrollar su estilo propio. Una estética muy cañera que la lanzaría al estrellato. Después llegaría su pixie (primero en rubio y luego en moreno) y un giro oriental que le sentaba de maravilla.
En 2018 ya se había definido como una de las españolas con más rollo del momento y mejores elecciones tanto estilísticas como de peinado.
Y durante estos dos últimos años no ha hecho más que consolidar este estatus. Ursula tiene ese punto de atrevimiento mezclado con estilo propio y elegancia que nos encanta y su pelo corto es emblemático. Ella lo sabe y juega con él todo lo que puede y más.
Fotos | Gtres
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