Solo hay una cosa más icónica que las canciones de Britney Spears y son sus videoclips. Desde su debut con Baby One More Time en un instituto típico norteamericano en el que los estudiantes parecían bailar más de lo que estudiaban, a su reinterpretación personal del planeta Marte en Oops!... I did It Again, pasando, por supuesto, por el concurrido avión de Toxic. Escenarios que han pasado a formar parte del imaginario popular colectivo como si de clásicos del cine se tratara. Ahora un museo en Los Angeles los ha recreado para que podamos formar parte de ellos en carne y hueso y nos tomemos los selfies que, sin duda, serán la envidia de gran parte de nuestro seguidores.
The Zone es una experiencia inmersiva única en el mundo para fans de la cantante que, a lo largo y ancho de nueve salas interactivas, recrea los escenarios de su vídeos musicales más famosos. Entre ellos, y además de los anteriormente citados, Stronger, Me Against The Music y la puesta en escena tropical de I'm a Slave 4 U durante los MTV Video Music Awards del año 2001, cuando bailó con una serpiente pitón sobre los hombros (en esta ocasión sustituida por una de juguete).
Además, cuenta con piezas auténticas donadas por la propia Spears, como el vestido con el que participó a los once años en el talent televisivo de los ochenta Star Search y el mono naranja, con transparencias, que llevó el videoclips de Till The World Ends.
En la sala dedicada a Baby One More Time se ha replicado el aula en el que Britney dejaba volar la imaginación mientras contaba los segundos que faltaban para que sonara la alarma que marcaba el fin de la clase. Tampoco podía faltar el pasillo con taquillas donde comenzaba la famosa coreografía y el gimnasio con la pista de baloncesto donde terminaba la ensoñación de la cantante.
En otra habitación los visitantes encontrarán el avión de Toxic, donde podrán empujar por su pasillo el carrito de las bebidas, con un sombrero de azafata en la cabeza. Mientras que en la sala de Oops!... I Did It Again hay una estación espacial, con un astronauta como el que se enamoraba de Spears incluido.
La mala noticia es que la exposición es temporal y solo podrá disfrutarse, en principio, hasta el próximo 26 de abril. Las entradas pueden comprarse a través de su web y tienen un precio de 59,50 dólares (unos 55 euros al cambio) y de 64.50 (59 euro) dólares durante las horas punta. La visita tiene una duración de entre 60 y 90 minutos y los menores de tres años pueden entrar gratis.
Fotos | The zone.
