Como broche final a una colección excepcional, Domenico Dolce y Stefano Gabbana echaban el cierre anticipado a la Semana de la moda de Milán por todo lo alto (técnicamente finaliza mañana miércoles), en coherencia absoluta con el espíritu "a contracorriente" de sus propuestas surrealistamente vintage. El Palazzo della Ragione acogía ayer una fiesta organizada conjuntamente con la revista Vogue para dar la bienvenida en sus instalaciones a la muestra "Extreme Beauty in Vogue", una selección de 75 imágenes de la mujer editadas en la revista alguna vez.
La reunión de estrellas que se congregaba en la capital de la moda italiana puede equivaler perfectamente a la gala del MET, y es que estaban todas, empezando por un maravilloso trío de ases: Eva Herzigova, Nadja Auermann y Claudia Schiffer, a cual más guapa y espléndida, todas vestidas por los diseñadores italianos.
La musa e ideal de belleza femenino de los diseñadores, que horas antes presentaba junto a ellos su nueva línea de cosmética, Scarlett Johansson, llegaba escoltada por sus mentores, y envuelta en uno de sus sensuales vestidos lápiz con estampado de leopardo. Maravillosa. Mucho mejor que de Oscar de la Renta......
Freida Pinto, que aprovechando el tirón de Slumdog Millionaire ya no se pierde ni una, de rosa palo, y Naomi Watts, excelsa como siempre con esmoquin masculino, fueron otras de las invitadas.
Kate Hudson apostó por la opulencia y se marcó uno de los diseños en dorado de D&G.
Alice Dellal estrenaba nuevo look, se ha teñido de morena y se ha convertido en un clon de L'Wren Scott con veinte años menos, y parece que como Sansón, con el pelo se le ha ido la fuerza: estaba de lo más recatada.
Anna Wintour, de Chanel (será porque estaba también Karl Lagerfeld), posaba junto a una siempre sexy Eva Mendes en color cereza.
Y Elsa Pataky, bastante correcta, se dejaba a Adrien Brody en casa.
Carine Roitfeld le ha cogido un cariño enfermizo a su abrigo de pelo de cabra: por favor, que llegue ya la primavera.
Miuccia Prada sin embargo se adelantaba a todo y todos y se presentaba con uno de los (sus) diseños que horas antes desfilaban por la pasarela. Bravo Miuccia, por algo te llaman "La Visionaria".
Margherita Missoni apostaba por ser la más tremebunda de la fiesta: ¿dónde iba la heredera del imperio de las cenefas con semejante traza?
Y Peaches Geldof se apuntaba al look lencero tan propio de Dolce & Gabbana.
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