Festival de cine de Málaga: de la acertada sencillez a las poses rídiculas

Una de nuestras Alfombras Rojas más importantes es la del Festival de cine de Málaga, que cada año reúne a lo más significativo del cine español en la ciudad andaluza. Pero que se arreglen para presentar sus nuevas películas no significa que siempre lo hagan bien. Empecemos por lo mejor del festival, que ya habrá tiempo de despotricar de lo malo al final del post.

La sencillez puntúa doble

Ya sabemos que muchas no tienen estilista (y las que lo tienen, a veces parece que no) y no saben realmente qué ponerse en este tipo de galas sin etiqueta definida, así que, ante la duda, mejor la sencillez. Un vestido favorecedor, tacones, y poco más. Si eres tan guapa como María Valverde con un vestido nude vale para lucir bien. La actriz Silvia Alonso también eligió le mismo tono maquillaje con su vestido plisado.

Me gusta también mucho el estilo de Andrea Guasch, con pantalones, una camisa blanca, zapatos de tacón rojos y joyas. Si te ves disfrazada con un vestido, éste es el look.

Pero si quieres presumir de cuerpazo (porque lo tienes), un vestido ajustado con cazadora de cuero para darle el toque juvenil y tendrás un look de diez. Carlota Baro acierta de rosa y negro.

Gala González también se apuntó a la fiesta (creó que pinchaba como DJ con su inseparable Miranda Makaroff) y fue de negro y largo. Bien por ella.

Cuando la pose lo estropea todo

Si eres una actriz de cierto nombre, primero, aprende a vestirte, pero, sobre todo, aprende a posar. Porque una mala pose estropea todo. No sé si es que los fotógrafos pidieron a María Castro que posara así con su conjunto plateado.

O le dijeron a Norma Ruiz que de culo mejor que de cara. Pero esas poses a lo Pataky sólo le quedan bien a ella.

Otra pose a olvidar: la de Adriana Ugarte. Acertaba con su little black dress, con sus sandalias y sus pendientes étnicos pero, a menos que se lo hayan regalado, no entiendo qué hace un Louis Vuitton así de grande para un conjunto de noche.

Para salir corriendo

A Melanie Olivares le dijeron que iba a un concierto heavy y la metieron en el photocall del festival para gastarle una broma, supongo.

Ana Fernández es otra de las que, esta vez, ha tropezado. Ese vestido le añade volumen en las caderas que no necesita y esas botas están pasadas de moda.

Y con lo mona que es Inma Cuesta, no entiendo cómo pudo elegir un vestido que le sentara tan mal. Igual con un par de tallas menos el vestido le quedaría mejor.