Penélope Cruz no ha debido de leerse la invitación con las características de la tendencia 'camp'. La actriz, que repite experiencia, se convierte en una de las peores vestidas de la noche porque no ha cumplido con la estética requerida. Podría ir mona para una premiere o cualquier otra alfombra roja pero no para la Gala MET 2019.
La actriz se ha decantado por un vestido en blanco y negro, un binomio siempre acertado pero no para una Gala MET. Un diseño largo de escote en blanco con detalle de la icónica flor de la maison, cuello halter y espalda al aire, y falda negra de volantes. Una creación firmada por Chanel.
Un estilismo que ha completado con una coleta alta con flequillo (estrenando look), pendientes de aro de su colección de Atelier Swarovski, bolso negro satinado demasiado clásico y un make up muy favorecedor.
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