Los Grammys son siempre uno de los premios que más atrevido y arriesgado recogen en la alfombra roja. Esta noche no iba a ser menos, con looks como los de Cardi B o Janelle Monáe. La cantante Katy Perry también ha querido aportar su granito de arena fashion con un estilismo que se queda grabado en la retina. Por sus formas estructuradas, sus colores y el efecto óptico que produce.
Katy Perry ha sorprendido con un diseño muy arquitectónico de Balmain, llamando la atención con su atrevimiento como siempre acostumbra. Esta vez con un diseño de palabra de honor con el cuerpo muy ajustado a su figura, realizado el lurex. Sin embargo, a la altura de la cintura el look se vuelve redondo, con forma de miriñaque que le da un volumen hiperbólico. Todo ello gracias a la estructura del estilismo y al tul, que envuelve la falda de forma muy femenina y dulce.
El outfit crea un efecto óptico con forma de reloj de arena que recuerda a los vestidos antiguos con faldas empompadas. Sin embargo, sus tonos millennial pink y plateados lo modernizan, jugando con los contrastes a nivel de tejidos, diseño y colores. No es el más favorecedor a su figura, pero en los Grammys se viene a arriesgar y sin duda Katy Perry lo ha conseguido. Por supuesto, con look beauty a juego a golpe de sombras rosas.
Fotos | Gtres, @katyperryperrykaty, @modapractica, @kpaddict.
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