Todo Hollywood parecía seguir los ciclos de las aves migratorias y viajar hacia el sur durante el invierno, sin embargo, en este caso el pretexto no fue el llamado de la Naturaleza, sino la celebración de la 18ª edición del conocido Festival de Cine de Palm Springs.
La alfombra roja se cubrió de glamour y sofisticación, de deliciosos vestidos de noche y como un previo a los Oscars nos encontramos con una gala en la que aparte del talento no falto el buen gusto.
No pudimos ver a la pareja más famosa del momento, pero Brad si que fue a promocionar la película Babel de mi compatriota Alejandro González Iñárritu. Sin embargo, otras bellezas internacionales si que adornaron con su estilo la alfombra roja: Sienna Miller no vistió estilo 60's para el estreno de Factory Girl, más lucío un espectacular vestido negro con un profundo escote. Todo se mantuvo en su lugar durante la noche y la actriz británica se lleva la palma en cuanto al mejor vestido.
Otra que nos dejó extasiados fue Jessica Biel, quien no sólo se llevo el premio a la actriz cuya carrera se encuentra en alza, sino que me recordó a ciertas estatuas griegas en su sobriedad y frescura a un tiempo.
La nota de color nos la brindó la dura competencia que la elección del color de la próxima primavera suscitó entre la homenajeada Cate Blanchett en un vestido de cocktail de Balenciaga y Kate Winslett también con un vestido azul de corte más romántico. No cabe duda que Kate se encuentra mejor que nunca.
Es díficil decidirse, sin embargo me quedo con el de Sienna, aunque el de Cate no me parece nada despreciable, sobretodo en cuanto a que sigue las tendencias. Ustedes deciden quien es la portadora del mejor vestido en esta gala hollywoodense.
Vía | Hollyscoop En Trendencias | Un año nuevo en azul