Nuestras expertas de belleza ya os han comentado las magníficas propiedades del aceite de ricino para fortalecer las pestañas e incentivar su crecimiento. Hoy voy a desvelaros otro de los beneficios de este aceite: su eficacia contra las legañas.
Hay mucha gente, sobre todo niños, que sufren un incómodo problema. Tienen legañas muy secas, muy difíciles de quitar, y que hacen que las pestañas se debiliten y se quiebren. En algunos casos, las legañas son tan molestas que incluso los ojos pueden quedar pegados por la mañana al despertarse.
El aceite de ricino va muy bien para estos casos. Lo podéis comprar en la farmacia, sin receta médica, y aplicarlo por la noche, antes de dormir, con un bastoncillo de los oídos. No es necesario aplicar una excesiva cantidad, con que se humedezcan las pestañas es suficiente.
Si sois constantes y lo aplicáis cada noche, veréis como en cuestión de un mes, vuestras incordiosas legañas han desaparecido y lucís unas pestañas más fuertes.
El aceite de ricino es uno de los primeros cosméticos utilizados. Ya en tiempos de los egipcios se usaba para abrillantar el pelo y como fijador. Actualmente, está presente en multitud de cosméticos como barras de labios y aceites corporales para después del baño. En Arrebatadora, ya habéis podido leer los beneficios de este aceite en el tratamiento de callos y verrugas.
Imagen | Flick
