Bio-Oil, aceite de plantas naturales y vitamina A y E, para combatir la deshidratación y las manchas del sol

Llevaba tiempo buscando un producto que me hidratase bien la piel del cuerpo y que, a ser posible, me eliminase o suavizase las dichosas manchas que me salen siempre en verano por culpa del sol. En la farmacia me hablaron de Bio-Oil, un producto formulado con los aceites de plantas naturales como la lavanda, la caléndula, el romero y la manzanilla a los que habían añadido vitamina A y E.

Según me explicó la farmacéutica, se trataba de un aceite hipoalergénico, que se podía usar tanto en la cara como en el cuerpo, recomendado para combatir los síntomas de deshidratación y, lo mejor de todo, era que, además, corregía estrías y cicatrices. ¡Vamos, la bomba!

Imagino que a vosotros también os pasa, y que no soy la única que nota como en verano su piel se deshidrata más que nunca por culpa del sol y de los baños frecuentes y, si me apuráis, hasta del aire acondicionado. Así que llevo unos días, aplicándome este aceite milagroso después de ducharme. He pensado en bajármelo incluso a la piscina para intentar contrarrestar el cloro y otros productos químicos que probablemente echen al agua, pero como no deja de ser aceite, me ha dado miedo, ¡no me vaya a freír como un huevo!

Me lo aplico masajeándome la piel, insistiendo un poco más en las zonas que tengo más secas, como los codos, rodillas o plantas de los pies. También me lo doy en la tripa y en las caderas, aunque mucho me temo que ya es un poco tarde para hacer desaparecer las estrías por culpa de los embarazos. Supongo que eso hay que hacerlo durante el embarazo. Pero, por intentarlo, ¡qué no quede!

También tengo una antigua cicatriz que me incordia un montón. Así que, con mucha paciencia, le estoy dando un poco de tico-tico, dos veces al día, con las yemas de los dedos, haciendo movimientos circulares. Tengo también una mancha de sol cerca del ojo, que no desaparece ni a sol ni a sombra, así que por el mismo precio también le doy un poco antes de lavarme las manos. ¡Ya os contaré si funciona! La farmacéutica me dijo que había que tener paciencia (mínimo tres meses).

De momento, la única pega que le veo es que, aunque me aseguraron que se absorbía fácilmente, Bio-Oil no deja de ser un aceite. Así que he de esperar un ratito antes de volverme a vestir, ¡por si las moscas! Precio: 19,13 euros (125 ml).

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