Conforme las mascarillas se alejan de nuestra vida en exteriores, son más las personas que se preocupan por el aspecto de su sonrisa. Y aunque el periodo anterior al destape fue un momento idóneo para aprovechar a arreglarse los dientes con tratamientos como brackets o invisalign, hay otras opciones para llegar a tiempo.
El blanqueamiento y las carillas dentales son ideales para mejorar de forma rápida la boca si nos ha entrado la prisa debido al descubierto. Se trata de dos soluciones estéticas para lograr una sonrisa radiante y por eso, suele ser la opción a la que recurren muchos famosos. Ninguna de las dos técnicas requiere anestesia y ambas son capaces de rejuvenecer la zona inferior del rostro.
En un momento en el que ha surgido un boom de demandas de retoques estéticos de última hora, estos tratamientos dentales se sitúan al nivel de protagonismo del botox, los rellenos de labios y las rinomodelaciones. Y así lo han señalado diferentes profesionales, como Antonio Cabanillas, director de una clínica dental, o los dentistas de la Clínica Dental Doctores Rey en Valladolid, por ejemplo. Se nota un mayor interés por los dientes.
Desde la Clínica Dental Ferrus & Bratos (Calle de Caleruega, 102 Madrid) nos cuenta que muchos pacientes, tanto hombres como mujeres, reconocen que el teletrabajo y las reuniones por videollamada, en las que ven su rostro permanentemente, han aumentado su deseo de corregir aspectos de su apariencia en los que antes apenas reparaban.
De igual forma, el prestigioso odontólogo Carlos Saiz (Gran Vía, 26 Madrid) asegura que la mayoría de sus pacientes quieren verse genial antes de sus vacaciones.
Blanqueamiento dental combinado
El blanqueamiento es uno de los tratamientos más agradecidos que existen, ya que permite, con un mínimo esfuerzo, blanquear varios tonos el color de los dientes. Y según los expertos, el procedimiento que consigue mejores resultados y mayor duración es el blanqueamiento combinado de férulas en casa con una sesión de lámpara en el centro.
La doctora Patricia Bratos (Ortodoncista y Cofundadora de Ferrus & Bratos) explica que, en su clínica, confeccionan unas férulas a medida de la boca del paciente que deberá usar en las horas de sueño junto a un gel blanqueador que contiene una sustancia llamada peróxido de hidrógeno. "Es precisamente este producto el que consigue aclarar el tono de los dientes. Su concentración en el gel es de entre un 10 y un 16%. Este proceso durará dos semanas".
Transcurrido este tiempo, tiene lugar una sesión con lámpara -de una hora de duración-. "La luz que desprende la lámpara acelera el proceso de blanqueamiento, consiguiendo unos efectos muy evidentes. En esta sesión, se aumenta la concentración de peróxido del gel, llegando a situarse entre el 20 y el 37,5%. Esto se debe a que la lámpara tiene la supervisión directa de un especialista y a que se aíslan las mucosas del paciente (labios, encías…), de manera que no entran en contacto con el gel", afirma la dentista Bratos.
Tras la sesión de lámpara, el paciente deberá volver a llevar las férulas junto con el gel blanqueador en casa durante otras dos semanas.
¿Su precio? 684 euros.
Microcarillas dentales
Otra opción de cara a mejorar nuestra estética dental son las carillas. Carlos Saiz, famoso por ser el autor de las sonrisas de celebrities como Pilar Rubio, trabaja en exclusiva en España con las Microcarillas Diamand Smile. Unas carillas totalmente diferentes a cualquier otra del mercado que destacan por ser de cerámica muy fina, pero resistente.
Estas carillas no requieren de tallado del diente natural y se personalizan y adaptan a los gustos individuales hasta en el más mínimo detalle (tono, forma, tamaño…).
Pero esto no es todo, tal y como el profesional asegura, el procedimiento para aplicarlas no es nada doloroso. "Cero dolor, cero necesidad de anestesia… y en solo 3 sesiones", resalta. Y con ellas "el resultado puede ser tan natural como uno prefiera", apunta.
Gracias a las nuevas tecnologías se puede previsualizar el resultado en la pantalla del ordenador y generar una impresión digital en resina idéntica a cómo serán las finales para que el paciente pueda probarse y escoger tonalidad.
El doctor explica que "lo más habitual es que se coloquen en los dientes más visibles 9-10 maxilar, aunque hay pacientes que sólo las requieren en la parte superior y blanquean la inferior". Y se puede hacer vida con total normalidad desde que se sale de la consulta, "se sienten durante unos tres días y la única recomendación es usar los molares con alimentos extremadamente duros o crujientes". En cuanto a su durabilidad, "entre 10 y 15 años". Aunque se debe realizar un control del tratamiento y una higiene a los seis meses.
¿Su precio? El precio aproximado de la microcarilla individual es de 675 euros.
Foto de portada | @matiamubysofia
Fotos | Cedidas por las clínicas
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