Seguro que en algún momento de vuestra vida habéis tenido curiosidad por probar una de esas supercremas que dicen definitivas para la piel ¿Qué pasaría sí utilizásemos una de fama indiscutible? En cuestión de belleza y a partir de cierta edad, las mujeres nos dividimos entre partidarias de tratamientos invasivos o agujas, o las más tradicionales, que no quieren ni oír
hablar de ellos y apuestan por las grandes cremas y tratamientos tópicos. Os confieso que me encuentro entre las dos tendencias. Apuesto por las agujas con muchísima cautela, pero me encantan las cremas. ¡Me apasionan las cremas y creo en ellas!
Durante este mes he tenido la oportunidad de probar una de esas consideradas fabulosas. Es de María Galland, una firma que me ha encanta desde que la conocí gracias a Maribel Yebenes, hace ya muchísimos años. En aquel momento me recomendó una mascarilla depurativa que cambió por completo el aspecto de mi piel, tratando mis zonas grasas (por aquel entonces yo tenía el cutis mixto). El truco consistía en aplicarme la mascarilla, de 3 a 4 minutos todas las mañanas solo en las áreas más grasas y problemáticas.
Gracias a este sistema conseguí convertir esas partes más “feas “ de mi rostro en tan depuradas y limpias como el resto, porque además me cerraba el poro. ¿Su nombre? Masque Souple 2, de textura cremosa a base de extracto de fresas. Con ella el cutis se revitaliza, aclara, depura y adquiere frescura y luminosidad. Pero ahora os voy a contar todo sobre la crema que he probado.
Crème Mille Lumière 1005
Se trata de una antiedad, en principio, para utilizar a partir de los 37- 40 años en adelante. Imagino que, como yo, cuando abrís por primera vez una crema, experimentáis unas sensaciones, que con independencia de los posteriores resultados, ya os dice mucho sobre ella. Pues bien, esto es lo que yo sentí desde el primer momento: su aplicación es muy agradable, se extiende muy fácilmente, cunde muchísimo y mi piel la absorbe rápidamente.
No deja ningúna sensación grasa pero su poder de hidratación es muy intenso. Esto último es algo que he ido descubriendo con su utilización. En invierno, con las calefacciones, al llegar la tarde siempre necesito reforzar la hidratación, y con esta crema no me ha pasado. No tengo ninguna sensación de sequedad, tirantez ni necesidad de reaplicar en todo el día.
Sus resultados
Ahora que llevo casi un mes utilizándola, día y noche (todavía me queda más de la mitad del producto), ya puedo hablar de resultados. Noto mi piel luminosa, uniforme y tersa. Ha sido un efecto progresivo que ahora con este balance de días puedo confirmar. Tengo la piel más bonita; una cuestión difícil de conseguir ahora que es pleno invierno y estoy blanca. ¡Una piel bonita sin maquillar!... Otra cosa es que lo haga para salir a la calle porque el frío nunca me favorece, ¡mi piel se enrojece y me lloran los ojos!
Sobre estos últimos y los párpados, los tengo muy delicados y muchas cremas me ocasionan molestias aunque ni siquiera las acerque al contorno. Hay que tener en cuenta que cualquier producto facial está en la cara y mediante las manos, y a lo largo del día, nos llevamos, sin querer, mínimos restos a los ojos. Con esta crema no he tenido ni una molestia.
Resumen: si lo que buscáis en una crema es conseguir una piel uniforme, luminosa, con buen tono y textura, esta es perfecta. ¿Su composición? Entre otros ingredientes el ácido hialurónico en combinación con complejo TOP•CMG, que aporta una hidratación máxima, suma de trufa, oro de 24 quilates, biopéptidos antiedad y un activador celular desarrollado especialmente para la firma. Los aceites esenciales de passifolora y de cardamine pratensis disminuyen la pérdida de humedad de la piel. Las sustancias activas como los fitoesteroles de la soja y del ñame silvestre la alisan.
Todavía estás a tiempo
Si estaís pensando en comprar una crema para regalaros por Reyes y se os ocurre que puede ser esta, ahora podéis disfrutar de una edición limitada, se trata del cofre Crème Mille Lumière 1005, que contiene la crema en tamaño normal y una mascarilla de regalo en miniatura de 15 ml. Se trata de Masque Mille Lumière 1030 . Estas pequeñas tallas me gustan y resultan muy prácticas en productos que no son de uso diario, pues evitan que el producto se deteriore por el paso del tiempo.
Esta me parece fabulosa, una mascarilla para antes de salir una noche o tras un día agotador en el que no ves salida a tu rostro y piensas que no volverá a ser el mismo. Te la pones y… ¡¡¡Voilà!!! ¡Magia para tu cara! La he encontrado súper, he notado un resultado muy reafirmante y la piel resplandeciente. Ideal para aplicar antes de una salida o compromiso, porque estaréis espectaculares descansadas y radiantes. El precio del cofre con la crema en envase de 50 ml y la mascarilla mini es 156 euros.
Podéis encontrar los productos Maria Galland en prácticamente todos los centros de belleza. Os adjunto algunos: Carmen Navarro, C/ Sagasta, Madrid, Vitabel 2000, C/ Monte Carmelo, en Sevilla, Centro de Etetica Sesbal , C/ Mariano Royo 9 en Zaragoza y Hotel Hesperia en La Toja, entre otros. Si cualquiera de estos no os viene bien podéis llamar al teléfono 965 16 58 18, donde os indicarán el centro más cercano.
Todos los productos que he probado de Maria Galland hasta ahora me parecen muy efectivos y agradables, si queréis que os diga la verdad, tras mi exhaustivo análisis puedo recomendar esta supercrema con la certeza de que os va a gustar.
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