A todos nos ha pasado, entras en un sitio y hueles a un perfume en especial y piensas para tí “por aquí pasó tal persona” o “me recuerda a …..”. Para conseguir que el olor de tu perfume se quede en tu piel hay varios consejos básicos. Cómo hacer que piensen en tí perfumándote bien es fácil, ya veras.
Lo primero es hacer una buena compra, lo mejor es ir por la mañana ya que la nariz está más receptiva que por las tardes. Nunca compres algo por que te encante en otra persona y en otra piel, eres única y lo que huele de maravilla en ti amiga quizás a ti no te quede bien en absoluto.
Pruébalo en la parte interna de las muñecas, espera 10m para que el alcohol se evapore y no falsee las notas de salida. Cuando este tiempo haya pasado las notas menos volátiles se habrán mezclado ya con tu piel, así sabrás exactamente a que huele en tu cuerpo. Si al día siguiente te notas el olor en tu muñeca y aun perdura podrás elegir sin temor a equivocarte.
Nunca pruebes más de tres perfumes a la vez, cuando llegues al cuarto no sabrás diferenciar unos de otros y tu nariz estará colapsada. Es recomendable también saber que los ingredientes de los perfumes se pueden identificar mucho contigo.
- Notas frutales. Para mujeres con vitalidad, fuerza y optimismo. Contigo nadie puede y tu perfume debe ser como tu, pruébalos los que lleven mandarina o limón.
- Notas especiadas. Estas se suelen dar en mujeres misteriosas, que quieren dejar una estela detrás y que renuncian a no ser recordadas. Búscalos con canela, vainilla y maderas. Algunos perfumes para hombre cumplen perfectamente con este objetivo.
- Notas florales. Mujeres románticas pero llenas de fuerza y candidez a la vez. El jazmín, rosa, clavel, flores silvestres te harán parecer una rompecorazones total.
Si ya has elegido tienes que conocer los puntos claves de su aplicación, lo mejor es dárselo donde late el pulso, detrás de las orejas, entre la nuca y el cuello y donde haya un pliegue en la piel (detrás de rodillas y codos). Un truco es darte un poco de vaselina en la piel y darle un poco de masaje hasta que la piel se caliente a continuación date el perfume.
Nunca mezcles aromas desiguales (desodorantes, cremas. perfumes) a no ser que sigan la misma línea del producto, ya que al rato se marean unos a otros y olerás a todo y a nada en un momento. Tampoco es recomendable perfumar ropa que no se pueda lavar como la ropa de abrigo, ya que de un día para otro junto con la contaminación atmosférica y el olor a tabaco pueden convertir esa prenda en algo que no te querrás poner más de una vez.
Imagen | avrenim acceber
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