Una mujer que no sea aficionada a la cosmética y el maquillaje puede sentirse confundida con el objetivo de belleza a conseguir: ¿queremos conseguir una piel luminosa, satinada, brillante o mate? Todas son opciones válidas según la ocasión excepto una. ¿Adivináis cuál?
Són adjetivos que utilizamos a menudo, algunos embellecen nuestra piel y nuestro look. La piel que hay que evitar es la brillante porque no favorece. Cuando nos referimos a brillos son el resultado del exceso de sudor y sebo de la piel del rostro. Los productos matificantes nos ayudan a regular ese exceso, lo podemos disimular también aplicando polvos matificantes. El típico gesto de empolvarse la nariz es el que tiene un sentido de belleza en este caso.
Entonces, ¿por qué existen productos iluminadores y satinados? No se trata de un sinsentido, la explicación es sencilla: el ojo humano distingue el brillo de una piel con exceso de sebo y la que tiene aplicado un producto iluminador. Se capta de distinta forma, el primero afea y el segundo embellece. Caprichos de nuestra vista que hay que tener en cuenta.
Descartada la piel brillante de la ecuación, nos queda la piel luminosa, la satinada o la mate:
Piel luminosa: el objetivo es cosmético, una piel bonita es la que presenta esa luz natural de las pieles jóvenes y sanas. Nada tiene que ver con maquillaje. Es el resultado visible que le falta a las pieles estresadas y/o asfixiadas, a las pieles muy secas. Se puede corregir utilizando una cosmética adecuada.
Piel satinada y/o mate: aquí hablamos de acabados de maquillaje. Bueno, en realidad la piel mate también es el objetivo de belleza de las pieles mixtas y grasas. Una piel mate también es una de las cualidades que debe tener una piel bonita.
Cuestión de gustos, podemos buscar un maquillaje mate en barras de labios, en polvos compactos o las sombras de ojos. Para seguir las últimas tendencias, tenemos el neceser de maquillaje saturado de gloss labial, de sombras nacaradas, incluso de bases de color satinadas para realzar determinados puntos del rostro.
Cada uno de los acabados de nuestro rostro es cosméticamente válido, nos favorece, con la excepción que os he comentado: la piel brillante. Hay que estar atentas, especialmente en verano a causa del calor, de controlar los brillos de la frente, la nariz, el mentón.
¿Con qué los elimináis? A mi me gusta el maquillaje en polvos compacto y, para emergencias durante el día, presiono un pañuelo de papel en la zona rebelde. Sencillo y eficaz.
En Trendencias Belleza | Un rostro femenino cosméticamente correcto