Sometemos a nuestro banco de pruebas arrebatador a Creamy Concealer Kit de Bobbi Brown. Es un producto dos en uno, por un lado es un pre-corrector y por el otro es un iluminador. Me gustan los productos que vienen en kit porque ocupan menos espacio, los colores vienen ya combinados y son ideales para llevarlos en el bolso.
El paso del corrector, a no ser que tengamos una piel impoluta y de porcelana, no nos lo podemos saltar. Es muy importante para unificar el tono de nuestra piel y que luzca perfecta.
Si os acordáis, en los 10 pasos de Bobbi Brown para un maquillaje perfecto, hablábamos de que la base de maquillaje no debe aplicarse en el contorno de ojos. Este producto es perfecto para aplicarlo en esa zona y dejarla acorde con el resto del rostro.
Veamos las partes de las que consta este Creamy Concealer Kit.
Parte superior: Concealer
Este concealer es un pre-corrector muy ligero y cremoso que sirve para unificar el tono de la piel, camuflar las ojeras y ocultar alguna pequeña imperfección (si la imperfección es más acusada tendremos que recurrir al corrector, del que ya os hablaré).
Hay que prestar atención al color que utilizanos. Si tenemos ojeras, será necesario un tono que tienda al rosa o al melocotón para anular el color azul de las mismas. Pero si no tenemos demasiadas ojeras y queremos un look más natural, debemos utilizar un tono con pigmentos amarillos para que se funda mejor con nuestro color de piel.
Lo ideal es utilizar un tono más claro que el color de nuestra piel. Si el resultado final tiende a grisáceo, el tono es demasiado claro; si por el contrario tiende a amarillo, el color es demasiado oscuro.
Se puede aplicar con una brocha plana y pequeña o bien con los dedos (recordad, con el dedo anular, que es el que menos fuerza tiene y con pequeños golpecitos). Lo ideal es aplicarlo muy cerca de las pestañas inferiores para que no se note ningún corte y en la zona interna del lagrimal para fomentar una mirada más brillante.
Tiene un segundo uso que es el de primer para los párpados. Aplicando un fina capa de concealer puedes unificar el tono del párpado y hacer que las sombras se agarren mejor a la piel y aguanten más.
Aunque me estoy centrando en su uso en la zona del ojo, también puedes utilizarlo como corrector en otras zonas, como en las aletas de la nariz, por ejemplo. Pero yo recomendaría un corrector más denso y cubriente.
Parte inferior: Polvos sueltos iluminadores
La parte de debajo de este kit contiene unos polvos sueltos iluminadores llamados Sheer Finish Loose Powder. Son unos polvos finísimos y muy suaves. Están encerrados en una tapa con cuadraditos. Para sacarlos, sólo hay que voltear el envase cuando esté cerrado y volverlo a abrir.
Se aplican con una brocha pequeña, plana y flexible. Sirven para iluminar la zona y para fijar mejor el concealer y evitar que se cuartee o que se formen líneas.
Particularmente, me gustan mucho estos polvos iluminadores porque son muy suaves, no resecan y aportan mucha luminosidad. También puedes utilizarlos para iluminar bajo el arco de la ceja, por ejemplo.
En líneas generales, el producto me agrada mucho por las texturas, el poder cubriente y el acabado. Pero es cierto que el precio me parece excesivo, ya que ronda los 30 euros. Otro punto negativo puede ser el de los pigmentos amarillos, ya que hay muchas mujeres que los consideran desfavorecedores. Pero eso sí, la gama de colores es aplica y con buen asesoramiento se puede conseguir el que mejor se adapte a tus necesidades. En concreto, estos son los colores que yo utilizo (soy morena de piel clara):
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