Una dermatóloga nos cuenta cómo deshacernos de un queloide y la infección de un piercing

Aprendemos a diferenciar entre queloides, bultos de grasa o cicatrices hipertróficas y cómo eliminarlos.

La fiebre por agujerearte sube como la espuma, hasta la Reina Letizia tiene un piercing. Nos encanta llevar una cascada de pendientes minimalistas, que se combinan entre sí para ser los protagonistas. Pero antes de poder llenarnos de pendientes de aro para las orejas hay que pasar por el proceso de hacerse el agujero y curarlo. ¿Te lanzaste, se te infectó y ahora tienes un bultito? Te contamos cómo solucionarlo.

Índice de Contenidos (6)

Esos bultos que salen no son queloides

Lo primero que debemos saber, para nuestra tranquilidad, es que esos bultitos que salen donde está el agujero no siempre son queloides. Aunque comúnmente los llamemos así, se tratan de cicatrices hipertróficas. La doctora Virginia Sánchez, experta dermatóloga, nos explica la diferencia.

"Los queloides son cicatrices desproporcionadamente grandes que genera el mecanismo reparador de la piel. Pueden aparecer por una lesión cutánea o de forma espontánea, pero siempre sobrepasa los límites de la herida que lo originó. Lo que ocurre con los piercings se llama cicatriz hipertrófica. Es abultada y dura, pero no sobrepasa las dimensiones de la lesión que la promovió."

Así pues, no debemos alarmarnos creyendo que tenemos un problema de queloides cuando nuestro nuevo piercing de tendencia se ponga duro y abultado. Solo es una cicatriz y puede salir, aunque no haya infección previa. Y sí, tiene solución.

Tratamientos para eliminar ese bultito incómodo

La experta consultada afirma que no existe una causa concreta para explicar estas cicatrices hipertróficas en nuestros piercings. "Es multifactorial y sobre todo desconocida, aunque mucho más común en gente joven. Puede salir haya o no infección previa. A veces salen de forma espontánea por un granito o una picadura y a veces en heridas quirúrgicas."

Que no cunda el pánico, porque que no se conozca su origen no hace imposible eliminarlos. Y aunque según la doctora "el mejor tratamiento es la paciencia porque la mayoría mejoran con el tiempo", estos son los tratamientos médicos que ella recomienda para sacar de nuestra vida el bulto en un abrir y cerrar de ojos.

Tratamiento de láser vascular para eliminar bultos del piercing

Este tratamiento ayuda a frenar su crecimiento en la fase inicial, cuando el bulto acaba de aparecer. Consiste en aplanar el relieve que surge en la piel con láser, reduciendo el lecho vascular que alimenta la producción de colágeno en exceso. Tiene una alta tasa de éxito y los estudios indican que solo vuelve a aparecer en un 10% de los pacientes.

Tratamiento de corticoides

Este fármaco puede administrarse de forma tópica o infiltrado en la lesión, ayudando a reducir su tamaño y mejorando el aspecto estético, en caso de que sean muy visibles. Hay otra opción más, los parches de silicona: se pueden recomendar en algunos casos para frenar el crecimiento.

Tratamiento con inyecciones de 5FU

Este fármaco ayuda a inhibir la proliferación de colágeno y, por lo tanto, reduce el volumen de las cicatrices queloide, verrugas, queratosis y cualquier otra hipertrofia cutánea. Se inyecta dentro de la propia lesión durante varios meses.

Otra opción es con crioterapia, que congela los vasos que nutren el queloide para reducir su tamaño.

Existen también otras recomendaciones médicas como la cirugía con anestesia local o la radioterapia. Pero la experta y jefa de servicio en el Hospital HM Sanchinarro opina que son "menos eficaces y más problemáticas." Sin embargo, en cualquiera de los casos nuestra recomendación es siempre consultar con un médico antes de escoger cualquiera de estas alternativas.

Toma nota, si lo que quieres es evitarte una infección

Si tienes el agujero recién hecho, seguro que la persona que se haya encargado de hacértelo te habrá dado instrucciones para limpiar y cuidar tu piercing. Sin embargo, nosotros hemos pedido consejo a nuestra experta dermatóloga para eliminar todas las dudas.

La doctora Virginia Sánchez recomienda aplicar Betadine jabonoso en los tres días previos al piercing, para reducir el número de bacterias existentes en la zona a la hora de hacer el agujero. Una vez hecho, lo adecuado según ella es tratar la lesión con Betadine y pomada antibiótica de forma alterna.

A pesar de todas estas medidas, la doctora afirma que "el riesgo de infección es alto por la localización en las zonas de las orejas para hacer piercings, la parte del cuerpo con más tipos. " Si la infección es algo a evitar y hay temor de que vaya más siempre se pueden tomar antibióticos, pero bajo las directrices y recomendaciones de un médico.

Fotos | Unsplash, Eline Rosina Jewelry.

En Trendencias | Llevé un piercing en el pezón 5 años y nunca más.

En Trendencias | El 'daith piercing' para la migraña, ¿de verdad funciona esta solución para la cefalea y dolores de cabeza?

Ver todos los comentarios en https://www.trendencias.com

VER 1 Comentario

Portada de Trendencias