Elevamos el maquillaje de nuestras miradas con la nueva máscara de pestañas y sombras de lujo de YSL que ya hemos probado

Ahora que toda la atención de nuestros maquillajes se centra en los ojos, hay que poner toda la carne en el asador, por lo que las nuevas joyas que han lanzado desde YSL Beauté me vienen como anillo al dedo para aprovechar este verano y, porqué no, lo que resta de año (las sombras principalmente).

Así, hoy os voy a hablar de la nueva Mascara Volume Effet Faux Cills Radical (37,05 euros 24,08 euros) y las nuevas sombras de ojos Satin Crush (36,25 euros 23,59 euros) de YSL, que son los últimos lanzamientos de la firma que han caído en mis manos estos días y con los que estoy encantada.

Y es que por un lado tenemos la máscara de pestañas con la que la maison reinventa la clásica Mascara Volume Effet Faux Cills, que ya era una pasada pero que ahora vuelve mejorada. Y es que, además de aportar mucho volumen, incluso más que su predecesora, está hiperpigmentada. Es un negro súper intenso el que tiene, lo que hace que las pestañas se resalten más.

En cuanto a su fórmula está enriquecida con negro de carbón que ofrece una cobertura de un negro intenso, cuyos pigmentos se mezclan con extracto de hoja de nogal, procedente de los jardines del Ourika de YSL Beauté, y con aceite de argán para ofrecer hidratación a las pestañas.

Además, han añadido un nuevo cepillo, muy similar al anterior (las cosas como son) que, según nos dicen, logra retener una dosis mayor de la fórmula antes de aplicarla, de manera uniforme, en las pestañas y posee unas fibras más flexibles y resistentes que crean un volumen ideal.

Lo cierto es que con muy poco esfuerzo las pestañas adquieren un gran volumen y un negro muy intenso (pero muchísimo), y todo sin apelmazar, se trabajan súper bien, y el resultado (si las trabajamos a conciencia) es de los dramáticos que me encantan. Además, esta máscara, no deja residuo en la ojera (al menos por el momento), algo que sí que me pasó con su predecesora después de usarla unas pocas semanas. Así, que súper contenta.

Y luego tenemos las sombras en formato individual, las Satin Crush de las cuales tengo tres tonos y que solo con un primer vistazo del packaging ya sabes que tienes una joya entre manos ya que es muy elegante, en negro metalizado y enmarcado en un bonito contorno dorado, con el emblemático Cassandre como protagonista.

Son unas sombras súper suaves, de las más suaves que probablemente tengo, muy ligeras y con una gran pigmentación, capaces de garantizar looks potentes con poco esfuerzo, incluso para las que no somos especialmente hábiles en las artes del maquillaje. Vamos, que hasta con los dedos se pueden aplicar y en una pasada conseguir un lookazo.

Así, de los seis tonos que han lanzado, los tres que yo tengo son preciosos:

• N.° 1: Scandalous Beige, que es un tono champán con un efecto irisado y brillante que es precioso y que hasta de iluminador podríamos usarlo.
• N.° 2: Excessive Brown, que es un marrón ligeramente topo precioso, perfecto para un discreto smoky.
• N.° 5: Radical Rust, que es más rojizo metalizado con matices más cálidos.

Aquí unos swatches sin filtro alguno para que veáis lo bonitísimas que son y que valen tanto para ahora, como de cara al otoño-invierno porque son unos tonos preciosos y muy versátiles. 

Sin duda, unos fichajes excelentes, elegantes, fáciles de usar y con el gran sello de calidad de YSL. 

Este producto fue facilitado para la prueba por por YSL Beauté. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas para más información.

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