Bueno pues aquí están las dos primeras mascarillas caseras. Como ya te comentamos en el post de preparación siempre es necesario limpiar la piel antes de aplicarte cualquier mascarilla. También es necesario tomarte un ratito de relax, así los ingredientes naturales que llevan actuaran más y mejor en tu piel.
Hoy trataremos, con la primera, ayudar a la piel víspera de maquillarla para evitar después que nos salgan brillos y de paso atenuar arrugas por su acción de efecto tensor. Esta mascarilla la consejo para pieles muy grasas ya que cierra el poro y evita que tangas que usar tan a menudo los polvos matificantes.
- Necesitas 1 clara de huevo, 1/2 pepino y dos cucharadas de leche en polvo. Bate a punto de nieve la clara, pica el pepino con la leche hasta que no queden grumos y añade la clara despacio para que no se baje. Se puede dejar en la piel unos 15m, después retírala con agua tibia primero y con agua fría después para cerrar los poros.
La segunda está pensada para el contorno de ojos, también atenúa esas pequeñas arruguitas que se forman por exceso de luz, que nos hace entrecerrar continuamente los ojos. Esta es necesaria para todas aquellas personas que renuncian a llevar gafas de sol, yo me propongo siempre llevarlas en el bolso, pero confieso que se me olvidan muchas veces. Cuando más las echo de menos es conduciendo cara al sol.
- Necesitas 1 yema de huevo y 1/2 manzana. Bate la yema de huevo con la manzana previamente rallada, aplícatela con las yemas de los dedos sin frotar. El truco está en ir poniéndola en pequeños trozos e ir apretándola en el contorno ocular sin darte ningún tipo de masaje. Hay que dejarla unos 15m y retirarla muy despacio con agua fría.
Te recordamos que después de cualquier mascarilla es necesario que te eches tu crema habitual diaria. También es importante después de hacerte una limpieza de piel que te la protejas del sol. Incluso estando maquillada los rayos ultravioletas penetran en tu piel. Protegiéndote evitas la aparición de manchas y pecas.
Imagen | treedork en Flickr En Arrebatadora | Especial mascarillas caseras: preparación de la piel (I)