La moda de las pieles bronceadas todo el año no deja de poner impedimentos al protagonismo de las pieles blancas. Y tienen mucho encanto. La actriz Andrea Riseborough es un ejemplo de ello, aquí la vemos hoy posando en el photocall para W.E en The London Studios
Un look mucho más suave que cuando lleva el cabello negro, creo que la envejece (foto inferior). Una piel blanca con un maquillaje adecuado es tan atractiva como la piel morena. Pero hay que tener en cuenta simpre el color del pelo.
Para las rubias o rubias pelirrojas, menos es más. Labios en colores nudes y naturales, coloretes en tonos rosados u albaricoque. El maquillaje de ojos no puede ser muy intenso, no le quedaría bien un ahumado por ejemplo. Adrea lo enfatiza en el párpado superior solamente, las pestañas inferiores sin máscara de pestañas ni perfilador. Está perfecta.
¿Qué ocurre si la mujer de piel blanca tiene una melena castaño oscuro o negra? Una misma piel, un maquillaje distinto a causa del contraste. Con los labios en rojo intenso, ¿no os recuerda a alguien? Claro, a Anne Hathaway, el icono moderno de rojo de labios.
Les sienta bien, marca más los rasgos del rostro pero no es posible maquillarlas con un rosa natural, un beig o un nude. Tendrían un aspecto “vampirizado” nada favorecedor. No hay que fijarse en el tono de piel para elegir los colores del maquillaje sino en el contraste de la piel con el cabello, con el color de los ojos.
Entre los dos looks de Andrea, me quedo con el primero sin dudarlo. Está muy guapa y natural, de morena queda forzado. Un detalle importante a tener en cuenta: sus cejas van en ambos casos a tono con el cabello.
Foto | Getty, Zimbio
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