Como usuaria de lentillas me encuentro siempre ante una gran variedad de opciones en el mercado, aunque yo soy fiel a mis Softlens de siempre. Aún recuerdo cuando empecé a usarlas que sólo existían las que duraban un par de años o así, y mi oftalmólogo me hablaba de países extranjeros donde se compraban desechables en los supermercados. Entonces me parecía algo utópico; hoy un paseo por la farmacia os puede provocar chiribitas en los ojos.
Y no estoy hablando de lentillas estéticas o de colores, sino de las correctoras de toda la vida. Comenzaron creando lentillas mensuales y en la actualidad también las tenemos diarias (las famosas Dailies). Ahora bien ¿qué opción es la mejor? Yo he estado usando unas Dailies estos días-cortesía del marketing que estaban llevando a cabo en la farmacia-y hoy os quiero contar mi experiencia.
En primer lugar, las lentillas mensuales y diarias no parecen distinguirse mucho: el tacto y el grosor es muy similar. Puestas en los ojos tampoco se nota ninguna diferencia en comodidad o hidratación. Sin embargo sí que es cierto que haciendo la prueba de la duración de una lentilla diaria en plenas condiciones duran muchísimo menos. El óptico me recomendó que las usara hasta que el ojo empezara a notar sequedad o notara alguna incomodidad, y esto se produce en torno a los 5 ó 6 días de uso.
Las lentillas mensuales me vienen durando aproximadamente 1 mes en verano y 1 mes y medio en invierno. Por lo tanto, la duración de un paquete es la misma. Las Dailies vienen en packs de 30, que a una media de 6 días de uso pueden durar 6 meses, exactamente igual que el pack mensual (que trae 6). Los precios son también similares (alrededor de 45-50 euros, dependiendo de donde las compres). Por lo tanto, en mi experiencia, son dos productos sustitutivos que pueden usarse indistintamente.
