Con la llegada de la primavera se presupone el buen tiempo (aunque no siempre es así y a los hechos me remito). Los primeros rayos de sol de la temporada nos llaman y ya nos entran ganas de comenzar a broncear nuestra piel. Sin embargo, hay una serie de precauciones que tenemos que tener en cuenta para las cuales os proponemos unos sencillos consejos para conseguir un bronceado más cuidado y uniforme.
Preparación de la piel
A ver, el tema de tomar el sol no es simplemente tumbarse y dejar que los rayos doren la piel. Llevamos todo el invierno (el largo invierno) tapadas, con apenas exposición sola (aunque ya sabemos que igualmente estamos sometidas a rayos UVA, así como de los UVB) por lo que toca preparar la piel.
El caso es que el primer paso para la exposición al sol se traduce, en primer término, en la exfoliación, es decir, en la eliminación de las células muertas. La falta de este paso puede suponer tener un bronceado desigual con las implicaciones estéticas que supone. Esta exfoliación se extiende tanto a cuerpo como a cara.
En cuanto a las veces que tenemos que llevar a cabo esta exfoliación la cosa ya cambia. Así, en el caso de que usemos un exfoliante que no sea muy agresivo, podremos usarlo hasta una vez por semana o 10 días, sin embargo, si preguntamos a los profesionales prefieren hacerlo cada 28/30 días para dejar a la piel regenerarse completamente. En mi caso, con una piel sensible, lo suelo hacer cada 15 días a lo sumo, aunque uso más a menudo las esponjas especiales para la exfoliación. Aquí dependerá de cada tipo de piel.
La Dra. Natalia Ribé aconseja realizar la exfoliación para estimular la circulación linfática y sanguínea. De este modo, aparte de promover la regeneración de las células, conseguiremos oxigenar el tejido y eliminar toxinas”. Además, también recomienda realizar tratamientos oxigenantes en cabina para limpiar en profundidad la piel, eliminando impurezas y devolviéndole el brillo necesario.
Por otro lado, y centrándonos en la zona facial, la Doctora aconseja como complemento a las exfoliaciones, las revitalizaciones faciales a base de ácido hialurónico y vitaminas, ya que hacen que nuestra piel esté más jugosa, hidratada y preparada.
Por lo tanto, además tenemos que contar con una buena limpieza e hidratación tanto corporal como facial, utilizando productos adecuados según las características de nuestra piel.
Y luego llega lo fundamental, protegerse contra la radiación UVA y UVB.
Protección solar
Y una vez que tenemos la piel preparada, llega el momento de protegerla. Son muchos los productos de protección solar que podemos encontrar en el mercado. Ahora nos centraremos, por ejemplo, en Sensai Silky Bronze, la línea solar de la marca que, aparte de proteger la piel, defiende al ADN del daño a nivel celular.
Se trata de un enfoque revolucionario y completo que soluciona eficazmente dos cuestiones sobre la piel: por un lado, proporciona resultados inmediatos a las necesidades de la piel contra los problemas que pueden aparecer cuando está expuesta a la radiación ultravioleta (incluyendo las líneas de expresión, la deshidratación y el exceso de producción de melanina); mientras que, por otro lado, protege profundamente la piel contra los signos de envejecimiento y problemas que puedan aparecer en el futuro (como líneas de expresión, pérdida de elasticidad, pigmentación irregular y piel deslustrada).
Como ya sabéis, para empezar a tomar el sol, lo ideal será utilizar una protección alta tanto en el rostro como en el cuerpo y un stick protector para las áreas delicadas como son el contorno de los ojos y los labios. Pues bien, esta línea nos facilita todos estos productos con la calidad que les avala.
Y si vosotras no sois de tomar mucho el sol, siempre podréis optar por los autobronceadores para los cuales también tenéis que seguir los pasos preparatorios ya que la piel estará libre de células muertas y en buen estado para aplicar este tipo de productos que, siguiendo con Sensai, tenemos la Silky Bonze Self Tanning con la que cuidaremos la piel hidratándola a la vez que le proporcionaremos un aspecto brillante, bronceado y sedoso. Gracias a una textura de gel que garantizan una aplicación rápida y homogénea con resultados visibles uniformes.
Además, en todo caso, debemos de tener en cuenta que el sol seca mucho la piel, por lo que será totalmente conveniente beber mucha agua, así como hidratar el cuerpo y el rostro a diario para mantener un aspecto sano y fresco.
Así que ya sabéis, cuidad y mimad vuestra piel, preparadla y usad altas protecciones que nos vamos a broncear igual, cuidando lo más preciado de nuestro cuerpo.
Foto | @galagonzalez
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