Ya hace cosa de un mes y medio que la mayoría de gente volvió a sus rutinas de trabajo después de pasar unas semanas de vacaciones. Éstas sirven para descansar, desconectar del estrés del día a día y olvidarse de los problemas personales. Pero una vez vuelves con la rutina tu cuerpo se resiente y prueba de ello es la aparición de ojeras en el rostro.
Los factores por las que salen éstas son varios, así que hoy te descubriremos qué hacen aparecer estas temibles marcas debajo de tus ojos y la manera de combatirlos (o ayudar a qué disminuyan). La mayor parte de la población ha sufrido de ojeras alguna vez en la vida, por suerte, no es ningún problema médico sino sólo estético.
Pero vayamos por partes, ya que es imposible tratar el problema sin saber qué son y porqué aparecen. Las ojeras son alteraciones en el color de la piel debajo de los ojos que representa (como ya hemos dicho) un problema estético ya que crean la impresión de ojos cansados, mirada perdida o triste.
Las causas
Son muchos los factores que pueden afectar a estas alteraciones. Las más comunes se resumen:
Herencia. La mayoría de las personas que padecen estas ojeras son por causa hereditaria. Aquellas personas con antepasados con ojeras tienen más posibilidades de sufrirlas.
Falta de sueño o acumulación de cansancio. Cuando no dormimos bien o lo suficiente (7 u 8 horas diarias) nuestra piel palidece y hace que las venas de debajo de nuestros ojos sean más visibles.
Falta de hierro.
Resfriado o congestión nasal. Cuando nos resfriamos y se nos congestiona la nariz, las venas que bajan desde los ojos a la nariz se dilatan y oscurecen haciéndolas más visibles.
Deshidratación.
¿Cómo evitar que aparezcan en nuestro rostro?
No existe una fórmula que las haga desaparecer, pero sí que puedes seguir varios consejos para prevenirlas o que disminuyan.
Beber 2 litros de agua al día. Los médicos lo recomiendan no sólo para esto sino para eliminar toxinas del cuerpo y prevenir la retención de líquidos (una de las causas de su aparición).
Dormir un mínimo de 7 horas diarias. Aunque hay veces que el trabajo o las circunstancias nos lo impiden, debemos descansar las horas recomendadas.
Aplicar rodajas frías de pepino. Son innumerables las imágenes que tenemos de mujeres tumbadas con unas rodajas de pepino en los ojos. Éstos deben aplicarse encima de los ojos cerrados un mínimo de 15 minutos.
No abusar de la sal. Ésta hace aumentar la retención de líquidos.
Tomar vitamina C. Ayuda a reforzar las paredes de las venas.
Fotos | SXC
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