Estas vacaciones, demasiada gente me hablaba del corrector de Kiehl’s, y todo alabanzas; así que lo primero que hice al volver a casa, fue probarlo. Lo segundo, contarlo. Todo lo que me habían dicho era poco para lo que Clearly Corrective Dark Circle Perfector con SPF 30 consigue. Os explico el porqué.
La hiperpigmentación periorbital y las bolsas se acentúan con el paso de los años debido a factores como mala circulación, daños provocados por los rayos UV y hasta el simple cansancio. Las ojeras y bolsas cada vez son más evidentes, y no es tan fácil dar con el producto adecuado. Yo, ya lo tengo.
La diferencia
Corrective Dark Circle Perfector con SPF 30 de Kiehl’s me encanta porque ilumina y perfecciona al instante y reduce el aspecto de las ojeras de una forma natural y ligera. Algo que no es tan sencillo en la práctica, dado que muchos correctores son realmente visibles, causando a veces un efecto peor que el que se quiere remediar.
Corrige y trata gracias una fórmula multiacción que proporciona beneficios inmediatos, pero también actúa a largo plazo, algo que lo aleja de ser un mero producto de maquillaje, para convertirlo además en un tratamiento. Su color mineral natural proporciona una cobertura y luminosidad ligera, para mi perfecta.
Al instante, ilumina y perfecciona la piel gracias a pigmentos minerales tratados con aminoácidos. “Activated C” proporciona un efecto iluminador a largo plazo al reducir la hiperpigmentación. Protege también, al estar desarrollado con SPF 30 de amplio espectro.
Su fórmula
"Activated C", ayuda a reducir la apariencia de las ojeras causada por la melanina y evitar la formación de futuras discromías. Aclara el tono cutáneo y alisa la textura de la piel.
Cafeína, rica en antioxidantes y con propiedades antiinflamatorias y capacidad para aumentar la microcirculación,
Dióxido de titanio, un filtro solar mineral ideal para el sensible contorno de ojos por su suavidad.
Pigmentos minerales tratados con aminoácidos que reducen la apariencia de las ojeras y ayudan a iluminar al instante.
Se mantiene durante muchísimas horas inalterable, no marca las arruguitas de expresión y es muy hidratante. No tiene parabenes ni perfumes, y sus filtros y pigmentos son minerales, lo que hace que su fórmula sea segura y suave. Creo que no se puede pedir más a un corrector. Salió en febrero y su precio es 34 euros. Unos suaves toquecitos bajo los ojos y...¡perfectas!
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