Sí, lo confieso, yo al igual que muchos de vosotros también he sido una victima de los tan odiados "brackets" en mi adolescencia, esas grapas metálicas pegadas a los dientes que hacían que tuvieras una sonrisa de lo más plateada.
Ahora el boom ha decrecido entre la población adolescente, pero se empieza a poner de moda entre la población adulta. Cada vez son más las personas de cierta edad, que dejan atras los complejos y se deciden por este tratamiento para conseguir la tan deseada sonrisa perfecta.
Uno de los principales motivos por el que la gente adulta se decide a dar el paso es la posibilidad de realizar la ortodoncia de una manera prácticamente invisible, ya que en la actualidad se utilizan ortodoncias casi transparentes, utilizando materiales de cerámica o policarbonato de color blanquecino. Estos últimos son más baratos que los cerámicos pero tienen más posibilidades de adquirir un tono amarillento con el paso del tiempo, sobre todo si fumas o tomas café con asiduidad, por lo que los cerámicos son el mejor recurso estéticamente hablando.
Incluso nuevos sistemas como la ortodoncia lingual se están poniendo de moda. Consiste en realizar el tratamiento con la parte interior de los dientes, con lo que queda invisible de cara al exterior. También se denomina ortodoncia invisible. Arg, ¿¿ por qué no se inventó antes??.
Eso sí, los precios entre 3000 y 5000 euros, según los casos.
Cambiará el color de los brackets, pero el negocio sigue siendo el mismo.