Probamos la mascarilla capilar Montibello para cabellos teñidos

Cristina F.Martel para Arrebatadora ©

Aunque el producto que utilizo es baño de color, el cabello teñido tiene unas necesidades añadidas que hay que tener en cuenta. Hace años que utilizo mascarilla capilar para cabello teñido y la que utilizo ahora es la Treat Color Perfect de Montibello.

En esta época del año se hace más necesaria porque el sol apaga mucho el color del pelo y lo aclara de una forma "descolorida". A partir de ya es recomendable utilizar productos específicos que protejan el pelo, mejor si el de acabado tiene filtro solar.

Os hablé de este tema cuando os expliqué mi experiencia con Okara, el mismo tipo de mascarilla para cabellos con color de René Furterer. Os lo anoto para que podáis comparar si la habéis utilizado.

Cristina F.Martel para Arrebatadora ©

Propiedades de la mascarilla Treat Color Protect

La propiedad de mantener el color del cabello teñido mejor y más tiempo es por el cuidado reparador que produra la mascarilla a la estructura del cabello. Se forma una capa protectora alrededor del pelo a modo de escudo: contiene ingredientes estabilizadores del color. Su fórmula tiene filtros UV y además de proteger, repara. La acción reparadora se obtiene, como la mayoría de productos cosméticos, con el uso continuado de la mascarilla. Como suavizante, puedes utilizarla con poca cantidad, desenreda muy bien. Como mascarilla, una vez a la semana durante los meses de verano le vendrá muy bien a tu pelo. Si está muy castigado, dos veces no es ninguna exageración.

En la foto inferior podéis ver la gama al completo: el champú (300 ml., 10,30 euros), el acondicionador (150 ml., 10,30 euros) y la mascarilla, todo para cabello con color.

Mi experiencia

La utilizo como desenredante y como mascarilla aunque admito que como mascarilla vengo utilizándola una vez al mes. La primera sensación es un intenso olor a frutas tropicales. El tacto es cremoso y agradable, se extiende bien sobre el pelo. No hace pegotes de producto, cosa que odio a la hora de repartir la mascarilla.

Pasar el peine es fácil y la acción desenredante y suavizante es inmediata. Algo que le restaría es el aroma que deja después del aclarado, el pelo se mantiene perfumado bastante tiempo. Pero es que los olores dulzones no son mis favoritos. A las que os gusta ir con el pelo perfumado estaréis contentas un buen rato.

Su eficacia protegiendo el color y el pelo me ha convencido. Lo que no me satisface del todo es su nutrición, cosa que no anuncian las indicaciones del envaso. Es justo. Pero la sensación de nutrición además de la hidratación y reparación que se obtiene con Okara es completa. Ambas mascarillas son muy buenas pero me quedo con Okara. Claro que el precio no es el mismo: el tarro contiene 200 ml. y cuesta 13,10 euros. Una relación calidad/precio más que justa.

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