El error que comete mucha gente a la hora de aplicar el perfume

Personalmente, como editora de belleza, tengo que reconocer que el mundo de la perfumería me fascina. Tengo cientos de perfumes que me encantan, de los que siempre aprendo algo y los que siempre me extraen alguna sensación. Eso sí, los perfumes o cualquier tipo de fragancia hay que saber usarla correctamente y conocer aquellos puntos en los que sí debemos aplicarlo y en los que no.

Cómo aplicar correctamente el perfume

Según dicen los expertos hay que aplicarlo el perfume en aquellas zonas en las que late el pulso, es decir, en el cuello, detrás de las orejas, en la clavícula, muñecas... Y la razón no es otra que es que son zonas en los que la temperatura corporal es más alta y por eso el perfume dura más y se evapora más lentamente.

Por lo tanto, nos lo aplicaremos detrás de las orejas (más que en el cuello) porque dura más y porque resulta siempre más fácil olerla. También tenemos la clavícula que es como una zona muy muy sensual y provocativa; y, cómo no, las muñecas donde se mantiene el aroma durante horas y se fija más rápido a la piel y en las rodillas, curiosamente, también es un sitio donde se suele aplicar, sobre todo en la parte trasera y antebrazos como diría Carolina Herrera.

Lo recomendable además, es aplicarlo a unos 10 cm de la piel para que se distribuya mejor.

Partes del cuerpo en las que no aplicar el perfume y qué no hacer para arruinarlo

Pero como todo, si no lo aplicamos debidamente, por muy bueno, caro o elegante que sea, nos arruinará por completo el uso.

Así, lo primero que tenemos que hacer es elegir bien el perfume para cada ocasión, no es lo mismo un aroma de día que de noche, que de verano o invierno, para una boda o ir a trabajar... Si tenéis dónde elegir, tomaos vuestro tiempo.

Además, mucho cuidado con las cantidades que lo poco gusta y lo mucho cansa. Podemos conseguir que el mejor de los perfumes se vuelva una auténtica pesadilla si nos pasamos con la cantidad. Siempre lo justo.

Por otro lado nunca nos debemos aplicar el perfume en la cara (razones obvias y porque además puede causar manchas), así como en las zonas íntimas incluidas las axilas (cuidado que tiene alcohol e irrita). De la misma manera hay muchos expertos que recomiendan no echarlo en el pelo.

Por último, ya sabes que hay un gesto que debemos evitar siempre que es el de frotar el perfume una vez nos lo hemos echado. Es muy típico eso de aplicarlo en las muñecas y frotar una contra la otra, pues bien, no hay que hacerlo porque  contribuimos a romper las moléculas y el perfume en sí mismo.

De esta manera, siguiendo estos mínimo s consejos podemos sacar el máximo partido a nuestros perfumes.

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