L'oréal también se lanza al efecto vinilo con su último producto, Shine Caresse, una barra de labios que es mitad gel, mitad gloss, con un suave aplicador y donde el packaging también cambia en esta novedad de otoño.
El packaging, el giro que L'oréal está dando últimamente a sus productos, es lo primero que sorprende. Una barra de labios de aspecto completamente diferente, se ha pensando en el exterior también, no sólo el producto. Y me gusta
Un efecto labios mojados, muy mojados, no tan vinilo como pretenden, pero sí lleno de destellos sin llevar purpurina, cosa que se agradece y mucho. El tono se parece mucho al de la foto, pero sin ser tan fucsia. Es intenso, pero no tanto. Y no tiene efecto voluminizador, como puede parecer aquí.
El efecto es de brillo intenso, al modo de un gloss, pero sin ser tan pegajoso. Y como sucediera con los últimos lanzamientos de YSL o Shiseido, con una sola pasada es suficiente para tener el efecto vinilo.
No es muy hidratante, y para las que os pase como a mi, no es un producto para todos los días, pero sí para dar ese toque de brillo y luz con un tono subido.
La gama cromática cuenta con tonos desde el fuccia más intenso, el que tengo yo, pasando por el nude más suave, el tono coral, el ciruela tan de moda y el rosa suave. Dicen que sus colores se inspiran en mujeres como Lolita, Marilyn, Princess, Juliette, Eve, Milady, Bonnie…
Me gustan, y me encantaría probar el más natural, acabado gloss sin lo peor de ellos. Para los que empiezan a jugar con los colores del maquillaje, Shine Caresse es un brillo con color a tener muy en cuenta. Para las que queremos productos un poco más naturales para acompañar un look, es una apuesta interesante.
Ficha de producto
- Aroma: 8/10
- Cremosidad: 7/10
- Hidratación 7/10
- Durabilidad 7/10
- Aplicación 8/10
- Cantidad: 3 gr
- Precio 12.99 euros
- Total: 7/10
El producto fue facilitado para la prueba por L'oréal. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas para más información.
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