Cada vez que se pasa la cuchilla, la cera, la crema depilatoria y otros métodos depilatorios por el cuerpo, aparecen granitos. La mayoría de veces, esos granitos, pasan a convertirsen en un enemigo contra el que luchar. Se forman debido, a que cuando nos depilamos, el poro está abierto y tiende a ensuciarse, provocando la infección de éste y la consiguiente aparición del grano.
Uno de los trucos para evitar que salgan los granitos después de la depilación es, aplicar un poco de bicarbonato en la zona depilada, de esta forma, el poro se cierra evitando así, la infección. Otro remedio es, el de desinfectar la piel con alcohol, cosa que no recomiendo que se haga en exceso porque reseca mucho la piel. Si optas por aplicarte alcohol, ponte algo de crema hidratante corporal después de haberte puesto alcohol, para que la piel no se quede tan dañada y tan seca. El limón, también es un buen desinfectante y ayuda a cerrar el poro. Y, si eres amante de lo natural, también puedes ponerte crema de aloe vera para ayudar a calmar las zonas inflamadas después de la depilación.
Es evidente que, no a todos los tipos de piel le sienta bien lo mismo, así que te recomiendo que vayas probando alguno de estos remedios y te quedes con el que mejor resultado te de. Los mejores, en mi opinión, son: el bicarbonato y el limón. ¿Cuál te sienta mejor a ti?
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