Es salir de la ducha y temer cómo va a reaccionar mi pelo. Si sufres de pelo encrespado, sabrás de lo que hablo. Soy una gran fan de las planchas pero sé que no es bueno recurrir a ellas un día sí y otro también. Por eso, intento siempre buscar alternativas. Los sérums de aceite para el pelo suelen ser una solución pero mi cabello además es de tendencia seco y la vuelta del verano es matadora. No responde.
Otras veces he sucumbido al poder del tratamiento de keratina pero este año no quería. Mi corte bob agradece de vez en cuando unas ondas con gracia y me niego a renunciar a ellas. Le da un estilo muy cool. Así que este año he probado algo nuevo: el tratamiento de proteína de quinoa.
Un tratamiento profesional de acción rápida que da nutrición intensa al cabello dañado y estresado. Y, además solo cuesta 20 euros.
Me lo hice en Ara Crinis y estoy encantada. Me ha rebajado bastante mi encrespamiento y le ha devuelto ese punto de hidratación y nutrición que le faltaba.
Neomar Martinez, director de Ara Crinis, explica que es un tratamiento que "facilita el peinado, manejo y definición de la melena". El secreto está en sus ingredientes. No sólo contiene quinoa, aunque este sea su principio activo. "Es un tratamiento rico en proteínas y nutrientes naturales. También incluye cebada, corteza de corcho y extracto de plantas y frutas".
La quinoa es una excelente fuente de proteína debido a que contiene casi un 15% de aminoácidos esenciales. Y dentro de este tratamiento capilar "sella las puntas dañadas y reduce el encrespamiento". Justo lo que yo necesitaba a la vuelta de las vacaciones.
Primero te reciben con unos aceites de aromaterapia, marca de la casa, de los que te dan la posibilidad de elegir tu favorito y te lo aplican para que te relajes. Y a continuación pasan a lavarte el cabello con un masaje muy agradable. Una vez el pelo está limpio le aplican el tratamiento y lo dejan reposar envuelto en una toalla húmeda caliente durante solo 5 minutos. "Este tiempo basta para que el cabello estresado recupera la nutrición y la fuerza".
Para terminar, retiran el producto y proceden a realizar un secado rápido para retirar la humedad.
Salí de allí con el pelo sedoso y brillante, como a mi me gusta. Y con el paso de las semanas noto que no he perdido el rizo natural pero si me ha bajado considerablemente el encrespamiento y el pelo se ha recuperado viéndose muy sano.
Fotos | @gigiringel, Ara Crinis
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