La purpurina es una forma de vida y es la nuestra. Cualquier excusa es buena para maquillarse a golpe de glitter: de Nochevieja a festivales o una noche de fiesta cualquiera. Todo es brilli brilli y fantasía hasta que llega el momento de desmaquillarse. Cero dramas amigas, que con este truco estamos salvadas.
Todas hemos intentado alguna vez quitarnos los restos de maquillaje de la cara con agua micelar y jabón facial. Días después seguimos teniendo restos de brilli brilli siempre. Esto ocurre porque los dos productos de limpieza básicos de nuestra rutina facial no son rival para el glitter y están pensados para maquillajes más básicos.
Pero eso no significa que tengamos que rendirnos. Porque donde falla el agua micelar nos rescata el aceite de coco. Hablamos del aceite natural más versátil, que utilizamos para el pelo, el cuerpo, las uñas e incluso la cocina. Pues él es la clave para luchar contra la purpurina rebelde.
Aceite de coco 100% natural de Arganour, 5,94 euros.
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Lo masajeamos con los dedos haciendo movimientos circulares en las zonas donde haya más purpurina para que el aceite la despegue sin arrastrar e irritar. Una vez lo hayamos conseguido solo tenemos que lavarnos la cara con agua y jabón adecuado para tu tipo de piel. Usa una muselina de tela suave para retirar el producto restante. Bye bye glitter, hasta la próxima.
Paño de muselina 100% orgánica de The Body Shop, 8 euros.
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Fotos | @sarafructuoso, @maccosmetics, Primor, The Body Shop.
