Trucos para limpiar bien pinceles y brochas

¿Sabíais que conviene limpiar brochas y pinceles después de cada uso? Muchas somos las que obviamos este pequeño detalle por pereza o por falta de tiempo. Sin embargo, en los suaves pelos de nuestros maravillosos pinceles se van acumulando un montón de bacterias que pueden ser el origen de algunos problemas cutáneos.

Igual que no se nos ocurriría secarnos con unas toallas sucias, tampoco deberíamos de maquillarnos con unas brochas que no estuviesen en perfecto estado de revista. Así que si no nos sentimos capaces de lavarlas después de cada uso, lo suyo sería que nos acostumbrásemos a hacerlo una vez a la semana o cada quince días.

Sabemos que el polvo acumulado es un nido de bacterias y, ¿qué mejor lugar para proliferar que al calor de los pelos de las brochas? El problema es que estas bacterias luego se depositan sobre nuestra piel cuando utilizamos los pinceles para maquillarnos, obstruyendo de este modo los poros.

Para limpiar como es debido nuestros pinceles y brochas lo mejor es verter el equivalente a una cucharadita de café de aceite en una toalla limpia. A continuación iremos cogiendo los pelos y los pringaremos bien en esta mancha de aceite hasta que queden bien engrasados alternando los dos lados del pincel. Se trata de hidratar los pelos naturales (de marta, visón, ardilla, tejón o potro).

Después mezclaremos en un bol un poco de agua caliente con jabón, y meteremos dentro nuestros pinceles y brochas moviéndolos de aquí para allá, y frotando las púas con las yemas de nuestros dedos para eliminar todas las impurezas. Si son muchos los pinceles y brochas que tenemos que limpiar habremos de ir cambiando el agua para que queden bien limpios.

En otro bol verter el equivalente a dos tercios de una lata de refresco de vinagre para meter en él las púas de los pinceles. Esto servirá para eliminar todas las bacterias que todavía puedan quedar en las brochas. Finalmente, aclararemos nuestros pinceles con abundante agua caliente antes de ponerlos a secar en un vaso alto con las púas hacia arriba.

Para quienes les preocupe mucho el tema de la higiene relacionada con los pinceles y brochas existen también máquinas para lavarlos, y en Sephora, por ejemplo, ofrecen un servicio de limpieza.

Foto | @quidproquoq
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