Cuando nos empieza a picar el bichito de la cosmética, el primer problema con que nos topamos es dónde y cómo guardar nuestros maquillajes de forma eficiente. Vienen en tantos tamaños y presentaciones diferentes que a veces resulta difícil colocarlos en una bolsa o estuche y llevarlos con nosotras para cuando es necesario retocar.
Una chica viajera y bastante habilidosa con las manos, resolvió el problema con una cajita tamaño paleta cualquiera, a la que pegó una base magnética. Una vez mejorada, pulida e industrialmente producida, su solución se transformó en la paleta UNII, en la imagen principal.
Hay marcas que venden paletas rellenables, como hacen MAC y Bobbi Brown, por ejemplo y es posible comprar tanto la paleta como “recargas”. Sin embargo, estas paletas solo sirven con recargas de la misma marca. Mejores alternativas son las paletas rellenables como las también magnéticas de ArtDecó, que si bien están diseñadas pensando en los tamaños de los productos de la marca, también pueden usarse (al menos las más grandes) para acomodar otros cosméticos.
Las paletas Unii son de verdad bonitas (vienen en seis colores) e incluyen un espejo además de hojas adhesivas magnéticas, pero en realidad no dan mucho más por los 29 dólares que valen (menos de 22 euros). Estoy segura de que hay entre vosotras alguna que ha inventado algo parecido, no es demasiado difícil. Por otro lado, en muchos casos podría ser necesario sacar los cosméticos de sus envases originales, para lo que también hay que tener cierta maña.
No sé, me ha vuelto a suceder con esta paleta que al principio me parece una idea buenísima, pero luego cuando lo pienso un poco, ya no me convence tanto. ¿Vosotras qué pensáis?
Más información | UNII Cosmetics
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