El guardarropa de cualquier estrella que se suba a un escenario durante una gira forma una parte importantísima del espectáculo y del conjunto de la gran experiencia que viven sus fans. Pero muchas veces, hasta que no han actuado delante de mucha y gente y durante varias horas, no se dan cuenta de las necesidades reales de este tipo de prendas. Hace falta que sean vistosas, trendy, que llamen mucho la atención, y que impacten tanto que la gente las recuerde incluso después de años y años. Y eso no es todo.
No sólo tiene que ser impresionante, también es importante que todo el vestuario de cualquier espectáculo musical vaya con la escenografía, con la portada del álbum que se está promocionando y que sea coherente con la imagen que un artista quiere transmitir. Aunque lo fundamental es que estas piezas sean cómodas y que permitan que quien lo lleva moverse por el escenario dándolo todo. Para lograrlo es importante que sean elásticas, aunque a la vista sólo se vea cuero o mucho glitter.
Este tipo de vestuario no sólo debe basarse en la estética y en la teatralidad sino que también debe ser funcional
También es importante que estas prendas estén ventiladas en sitios estratégicos para que el artista no acabe tan empapado que parezca que acaba de salir vestido de la ducha. Algo especialmente importante en el caso de las mujeres, que ya de por sí tienen que ir muy maquilladas, y peinadas de manera especial, cuando se trabaja desde un escenario y no se está cerca del público.
Esto es algo que van aprendiendo todos (artistas y diseñadores) después de comprobar todos los errores que se van produciendo al actuar en escena. Errores que, incluso, pueden llegar a provocar hasta pequeños y molestos accidentes. Por ejemplo, cuando los cristalitos con los que se adorna una prenda o los diseños en 3D pueden llegar a cortar la piel. También es muy importante realizar un buen patrón que permita que las piezas de las que está compuesta una prenda se adapten bien a la morfología del cuerpo de quien la lleva, y que después de estirarse recuperen otra vez su forma original sin deformarse.
Trucos para atraer la atención
Existen trucos para atraer la atención del público sobre una zona del cuerpo. Cuando el artista acompaña su actuación con una coreografía, para que esta resulte más impactante se suelen colocar paillettes o tejidos brillantes en brazos y piernas que al moverse crearan haces de luz. Si el artista en cambio está interpretando una balada, procuran concentrar toda la atención sobre su rostro utilizando para ello diferentes accesorios como collares, sombreros o espectaculares máscaras como las que suele ponerse la cantante Björk.
Desde hace ocho años, James Merry - un artista especializado en el arte del bordado -, crea las espectaculares máscaras de encaje que suele lucir Björk durante sus actuaciones. Ambos han creado una sinergia muy productiva y enriquecedora que hace destacar a la cantante por su imponente y original estilo a la hora de vestir.
Hay artistas que no son capaces de visualizar un diseño en un croquis y necesitan probarse las prendas
Por eso es importante que los diseñadores estén muy al tanto de las nuevas tecnologías y de los tejidos inteligentes para poderlos incluir en sus diseños, aunque eso signifique que para ponerse al día tengan que realizar un curso acelerado de ingeniería electrónica o pedir ayuda y asesoramiento a ingenieros de la NASA. En estos momentos me estoy acordando de aquella imagen en los Grammys del 2008 cuando la chaqueta del Sergeant Pepper se iluminó de repente en escena gracias a una serie de luces LED colocadas de forma estratégica y que se encendían apretando uno de los botones de la chaqueta.
Visto y no visto
Los diseñadores también echan mano de las técnicas empleadas por los ilusionistas del Quick Change, capaces de cambiarse en escena en cuestión de segundos. Para lograrlo son capaces de diseñar trajes de hasta diez capas de las que el artista se va desprendiendo como si fuese una cebolla utilizando para lograrlo botones a presión, velcros, etc. Se trata sin duda de trabajos muy personalizados que requieren mucha preparación y expertise además de un buen diseño, ¡claro!
Mención aparte merecen los zapatos. Para este tipo de espectáculos los más demandados son las botas de moteros, las cuissardes y los sneakers. Las suelas de caucho son las mejores porque los artistas al bailar necesitan estar seguros y saber que no van escurrirse en ningún momento durante las dos horas de media que suelen durar los espectáculos de este tipo. Durante las giras se trabajan siempre con dos pares de cada modelo para tener uno de repuesto si fuese necesario. El calzado es muy importante pues ayuda a completar un look, a crear a un personaje y suele contar una historia por lo que la mayoría de las veces suele estar personalizado.
La información es poder
A la hora de plantear el vestuario que un artista lucirá durante una gira lo más importante es la información. Los diseñadores suelen sentarse a hablar con todos los actores de esas macro producciones para entender bien el concepto, y encontrar entre todos un hilo conductor que garantice que todos vayas a trabajar en la misma dirección. Es importante que los diseños de las prendas que conformarán el vestuario de un espectáculo estén en consonancia con la escenografía y que también se ajusten perfectamente a las coreografías y bailes sin que entorpezcan sus movimientos.
Para lograrlo lo normal es convocar reuniones donde todos hacen muchas preguntas y surgen ideas que se van concatenando hasta que dan con una idea final que convenza a todas las partes. Lo peor es cuando una de las partes tiene una idea muy clara y no da su brazo a torcer. Os pongo un ejemplo: Beyonce contrato a Rubin Singer para que le crease un modelito que quería lucir durante la actuación de la Superbowl del 2013. La cantante le explicó que quería que le hiciese un bustier parecido a los que Jean Paul Gaultier diseñó en su día para Madonna, sólo que quería que el suyo fuese de cuero negro, llevase encaje y piel de pitón.
Diseño y funcionalidad
Rubin se puso en marcha y le confeccionó a Beyonce lo que le había pedido. La cantante se lo probó y le sentaba fenomenal sólo que... ¡no podía moverse! Rubin Singer tuvo que darle muchas vueltas al diseño colocando telas elásticas y mallas en sitios estratégicos para que la cantante pudiese desplazarse con comodidad por todo el escenario. Rubin Singer reconoció después que fue uno de los modelos más complicados que ha tenido que diseñar a lo largo de su carrera ¡y eso que no ha tenido que vérselas con Madonna que tiene fama de ser una perfeccionista patológica!
Hay artistas que son como algunas novias que prefieren probarse un vestido ya hecho a que les hagan un traje personalizado a la medida que no son capaces de visualizar. Ese, por ejemplo, es el caso de Britney Spears que para su gira “Britney: Piece of Me” contrató a dos diseñadores (Nicolas Jebran y Bao Tranchi) pidiéndoles que le confeccionaran dos propuestas cada uno para luego probarse los modelos y poder elegir, viéndoselos ya puestos, los que mejor le sentaban.
En fin, que cada persona es un mundo y cada caso es especial, pero la labor de los diseñadores especializados en el vestuario de los artistas añaden a la complicación de la creatividad la de tener que realizar prendas cómodas que permitan el movimiento y que no hagan sudar demasiado. ¿A alguno de vosotros os interesa este mundo? Si tenéis alguna anécdota nos encantaría que la compartieseis con nosotros.
Fotos | Cordon Press
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