Luis Miguel es uno de esos artistas a lo que les gusta sentirse únicos. Él pide y los demás le complacen. Cuando sale de gira, envía una lista con todas sus exigencias a empresarios y hoteles. Todos deben saber qué necesita en cada momento. En su último concierto en Sancti Petri, pidió algo que sorprendió a todos. Al parecer, se negó a pisar el mismo suelo que el resto de mortales.
Sí, es real. Luis Miguel no quiso caminar por donde habían caminado otros. Puede parecer una locura, pero así lo pidió el cantante. Nadie sabe por qué no está dispuesto a pisar el mismo suelo que el resto. Al parecer, un hombre con su éxito y talento no puede rebajarse a tal nivel. Ni corto ni perezoso, así lo hizo saber a los trabajadores del hotel en el que se hospedó.
"Durante su paso por el hotel de cinco estrellas de esta zona gaditana, pidió que le tiraran sábanas para no pisar por donde el resto pasaba", cuentan en exclusiva desde Informalia. Concretamente, se alojó en el Palacio de Sancti Petri, también llamao Gran Meliá Hotel. Las suites llegan a tener un precio superior a los 1.000 euros por noche.
Luis Miguel
Al parecer, el cantante acostumbra a hacer peticiones extravagantes. Le gusta que que camerino esté "forrado con telas blancas para no sentirse encerrado" y suele pedir rosas del mismo color. "Tampoco pueden faltar las toallas blancas, muestra de pureza, o el agua embotella de las islas Fiji", cuentan desde Semana. Para ahorrarse el tráfico de algunas ciudades, suele moverse en helicóptero.
Fotos | Instagram @luismiguel
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