Malos momentos para la familia de Pepa Flores, conocida en el mundo entero como Marisol. La malagueña se ha quedado viuda de su pareja, Massimo Stecchini, con el que la actriz lleva 35 años de historia de amor. El italiano ha fallecido en su vivienda de la Malagueta este domingo 3 de septiembre de un infarto según ha podido conocer el periódico malagueño 'Diario Sur'.
Massimo llevaba años regentando una conocida pizzería en la capital de la Costa del Sol, el restaurante 'El Trastevere'. Stecchini compartió prácticamente toda su vida con Pepa Flores desde que esta se separó de Antonio Gades, con el que contrajo matrimonio en 1982. Su vuelta a Málaga estuvo marcada por su historia de amor con el pizzero con la playa de La Malagueta como escenario principal. De hecho, ambos compartían la vivienda de la intérprete en el paseo marítimo.
A pesar de ser once años menor que Marisol, Massimo siempre supo estar a la altura de las circunstancias, respetando y apoyando a Pepa Flores en su decisión de dejar de ser un personaje público y vivir ajena a todo lo que tuviera que ver con el foco mediático. De hecho, no le importó nunca hacer de intermediario entre la malagueña y la prensa cuando la actriz estaba de actualidad por algún tema relacionado con su vida privada o su carrera, como cuando recibió el Premio Goya de Honor en el año 2020 y fueron sus hijas quienes recogieron el galardón.
Ahora, Pepa se enfrenta a este mazazo emocional tras la inesperada muerte del que consideraba su marido a pesar de nunca haberse querido casar. Era su compañero de vida, su confidente, la persona de máxima confianza de la artista. Una noticia que llega coincidiendo con la grabación del documental 'Marisol, llámame Pepa' en producción de Sarao Films y con la familia de la artista como principales narradores.
Fotos | Telecinco
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