Carlos Pérez
EditorNada parece impedirle a Juan Carlos hacer lo que más le gusta. Por muchas advertencias que reciba desde Zarzuela, él no renuncia a su placer más valorado: surcar las aguas gallegas junto a sus amigos de siempre. Al parecer, en Sanxenxo ya se preparan para el regreso del emérito. Después de Semana Santa comienzan las regatas y Juan Carlos no está dispuesto a perdérselas.
El 26 de abril es el gran día. El Bribón y los otros barcos atracados en Sanxenxo saldrán a la mar y allí estará Juan Carlos. Junto a él, como siempre, Pedro Campos. Una vez más, el que fuera monarca se alojará en la casa de su gran amigo. Cabe señalar que la vivienda es grande y el Bobón tiene dispone de algunas dependencias para su uso exclusivo.
Tal y como recalcan desde Monarquía Confidencial, Juan Carlos está dispuesto a navegar a pesar de las dificultades que arrastra desde hace tiempo. Ha perdido prácticamente toda la movilidad de su pierna izquierda y confía en los tratamientos que le ofrecen sus médicos de Ginebra. Los profesionales advierten que la mejora del monarca será mínima debido a su edad.
Juan Carlos I y doña Elena
Poco más puede hacerse para ayudar al emérito en este campo. A sus 87 años, sus huesos están debilitados y debe asumirlo. Él lo sabe, pero no está dispuesto a renunciar a su gran pasión. En todo caso, surcará las aguas sobre una lancha a la que llaman 'Cristina' para evitar las dificultades de acceder al famoso Bribón.
Fotos | Gtres
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