Resurgen cada vez que llega la temporada estival cual ave fénix de sus propias cenizas y así llevamos ya un par de años dejando entrar en nuestras vidas a nuestros colores candy favoritos.
Las firmas de moda parecen decantarse por el azul del cielo que reina en un día espléndido, el aguamarina que nos hace desear a gritos que alguien invente el teletransporte y nos lleve a una playa paradisíaca, el amarillo en todas sus tonalidades como las del sol según la hora del día en la que nos encontremos, el rosa que tiende a ser tierra porque es el color del optimismo y del buen rollo por excelencia o el malva del que se pintan las flores con el efecto más relajante, porque el estrés no se viene con nosotros de vacaciones.
Y de la pasarela a la calle. Las celebrities han tomado buena nota de la propuesta, se han adueñado de la tendencia y se la han llevado a su propio terreno.
Piernas de vértigo
En el caso de Taylor Swift, su máxima es lucir piernas kilométricas, que por algo las tiene aseguradas. Remata su vestido de cortes estratégicos laterales con tacones de infarto que hacen que sus extremidades inferiores parezcan aun más interminables. La cantante es una enamorada de los colores candy en todas sus tonalidades con lo que se convierte en la perfecta embajadora de esta tendencia, además el rosa de sus zapatos combina a la perfección con el frasco y la fragancia de "TOUS Neoncandy", para un verano de los que dejan huella.
El largo tobillero
El largo de estos vestidos es complicado pero Miranda Kerr tiene la mejor solución para lucirlos. Ella se decanta por uno camisero para poder desabotonar tanto la parte de la falda como la del escote hasta la altura deseada. Así puede seguir haciendo alarde de ese estilo sensual que la caracteriza. El toque trendy lo añade con las gafas de sol pentagonales que son del mismo tono que las sandalias romanas y que casa a la perfección con el del vestido, y es que combinar colores candy siempre es un win.
Neón Candy
Si alguna celebrity sabe dar una clase magistral de estilo con tan solo estudiar al detalle su look, esa es Diane Kruger. Su elección, en esta ocasión, pasa por mezclar el amarillo más candy con el tono más neón y combinarlo con uno de los complementos más in de la temporada: las sandalias gladiadoras.
Bodas de verano
Hay un código no escrito que dice que en las bodas no se puede ir vestido ni de blanco ni de negro, así que ya tenemos la excusa perfecta para elegir un vestido de color como el que lleva Poppy Delevingne. Los tonos pastel favorecen porque resaltan nuestro bronceado por lo que en verano es la mejor época para lucirlos.
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