El desfile de María Escoté ha tenido lugar tras el de Ion Fiz hoy en Cibeles Madrid. La catalana ha estado arropada por amigos, seguidores y caras conocidas que han disfrutado de principio a fin la colección.
Negro. Este es el color en el que María Escoté nos presenta el otoño-invierno de 2011. El negro ha inundado cada pieza de la diseñadora en diferentes materiales como las, otra vez presentes, transparencias, el p.v.c, el charol, la rejilla. Tejidos atrevidos para chicas deshinibidas.
El negro ha sido el color estrella de María Escoté salvo tres o cuatro piezas en las que encontrábamos un estampado pictórico precioso. En camiseta, vestido o short, pero siempre, muy muy ceñido.
La rejilla también ha estado presente en el desfile. Se adhería a las modelos y se mezclaba con prendas tan potentes como el pantalón de campana o las faldas largas.
Bodys, trikinis, todo elemento sexy ha tenido su lugar en esta colección solo apta para los espíritus rockeros y deshinibidos.
Los extremos están de moda y Escoté lo ha dejado ver en sus propuestas. No hay espacio para medias tintas. O maxi vestidos y pantalones de campana o mini vestidos y escotes vertiginosos.
Las modelos con pelo frito y coleta vestían unas gafas de sol con un punto muy John Lennon.
En definitiva, una colección diferente, atrevida y no apta para todas, pero que nos ha dejado ver una vez más el buen saber hacer de María Escoté y su punto más cañero.
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