El diseñador ha unido color y volúmenes conjugándose de forma contenida para crear un estilo sexy y sosegado al mismo tiempo. Sin olvidar, mediante pequeños guiños, que se trata de la temporada Primavera-Verano 2013.
Los protagonistas absolutos de la colección de Miguel Palacio son los vestidos, algunas veces sueltos y otras ajustados al cuerpo hasta la altura de la rodilla. Los largos se despegan desde el principio creando una línea vaporosa y mucho movimiento. Sin embargo, los trajes sastre se presentan pegados a las curvas femeninas.
El recurso más utilizado por el diseñador ha sido el drapeado en los escotes y alguna que otra espalda al aire y el material prioritario, la seda, aunque también hemos visto prendas confeccionadas a base de voiles, tweed y popelín. Además, las aplicaciones metálicas, organzas con bordados geométricos e incrustaciones de paillettes han sobresalido de la pasarela.
En cuanto a la paleta cromática, los colores que hemos visto van desde el verde esmeralda y el rojo geranio hasta el azul tinta, el marfil y el marino. Los complementos han seguido una línea sublime con cinturones con hebillas de formas marinas en oro o borlas de piel.
Monos
Aires masculinos
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