Las alpargatas son un tipo de calzado que existe desde hace muchos siglos. En el museo arqueológico de Granada se conservan unas que se encontraron junto a unos restos humanos en la Cueva de los Murciélagos que se estiman pueden llegar a tener 4.000 años pues datan del Neolítico Medio. Lógicamente, se trata de una versión muy primitiva y básica de las que hoy conocemos, pero son el testimonio más antiguo de cordelería que tenemos en España.
Las alpargatas son unas sandalias ligeras cuya suela está hecha de esparto trenzado y de tela de lino. La fabricación artesanal de estas alpargatas era una ocupación a la que se dedicaban numerosas familias (hombres, mujeres y niños) que las hacían en sus domicilios al amor de la chimenea o sentados en los poyetes a las puertas de sus hogares.
Este tipo de calzado lo llevaban desde los militares de la corona aragonesa en el siglo XIII hasta los curas, pero también los mineros o la gente del campo. Lo normal es que se usaran las zapatillas de tela oscura durante la semana y las de lino crudo los domingos.
En función de las regiones existían pequeñas variaciones en el diseño y con la aparición de los coches y de los tractores se reforzó su suela de esparto cosiéndo a ella la goma de las llantas viejas de los neumáticos. Hacia el año 1950, la evolución de la moda obligó a los fabricantes de alpargatas al darles un nuevo twist, dando vida a diseños más sofisticados para que se adaptasen a las nuevas tendencias.
El nombre de espadrilles viene del catalán “espardenya” que hace referencia a la hierba espesa, al esparto que se utiliza para tejer su suela. En 1960, el mismísimo Yves Saint Laurent hizo un pedido muy específico pidiendo que le fabricasen unas espadrilles de tacón hecho de esparto. Algo nunca visto hasta la fecha. A partir de entonces era muy habitual ver a las señoras que veraneaban en la Costa Azul francesa luciendo un par de alpargatas que se ataban con un lazo al tobillo.
Las alpargatas siguen siendo muy populares ya que su suela al ser de esparto natural se adapta perfectamente a la forma del pie y permite que la piel respire por lo que en verano son muchos, tanto hombres como mujeres, quienes las usan.
Es curioso como las grandes marcas de bolsos y de zapatos italianas reivindican el sello de "Made in Italy". En estos momentos me estoy acordanodo de Tod's, de Ferragamo, etc. Aquí, nosotros tenemos un refrán que asegura que nadie es profeta en su tierra. Pero deberíamos apoyar un poco más este tipo de calzado fabricado sobre todo en España, que existe desde hace más de 4.000 años por lo que ha demostrado ser absolutamente atemporal, ¿no os parece?
Dicho lo cual hoy quiero hablaros de unas alpargatas 100% Made in Spain llamadas Costà. Se trata de un pequeño taller de Málaga que fabrican a mano alpargatas clásicas hechas con materiales naturales de primera calidad como el lino y la seda, que han ido implementando con nuevos materiales y un diseño más moderno que incluye la piel.
Unas alpargatas que gracias a su simplicidad y buen gusto accesorizan a la perfección todo tipo de outfits, vistiendo los pies de forma trendy al tiempo que proporcionan una gran comodidad. Eso explica que muchas novias las encarguen para repartir entre las invitadas a su boda, para que puedan bajarse de su tacones y bailar al son de la música toda la noche.
También se han puesto muy de moda entre aquellos que acuden todos los años a la romería del Rocío o a la feria de Sevilla pues las últimas colecciones a las que han llamado "Duende al Sur" y "My Funny Espadrilles" incluyen en el lino o en la seda los mismos estampados o bordados que se pueden ver en los mantones de Manila. Si queréis saber puntos de venta y precios podéis enteraros visitando su página web.
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Sitio oficial | Costà
En Trendencias | La fiebre de las alpargatas ha llegado a tus pies
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