El frío ha llegado hace muchos días pero este año parece que las montañas no quieren cubrirse de blanco. Han tardado un poquito pero todavían quedan días de nieve para esquiar y hacer snow.
Los deportes de nieve se convierten en el hobby más chic del invierno. Curiosamente las pistas de esquí se transforman en auténticas pasarelas donde desfilan modelitos impresionantes. Si eres de las que vas a esquiar y eliges de tu armario cualquier cosa, ese jersey tamaño XXL que te queda grande o la cazadora más vieja que tienes pero que abriga mucho y los peores pantalones, ya puedes ir cambiando el chip y renovando tu equipo. Porque ahora, a la nieve, también se va a la última.
La equipación es básica para afrontar las largas jornadas de nieve. Por eso, desde Trendencias te proponemos algunos modelazos de Stella McCartney para Adidas. Que no falte el glamour, el estilo y elegancia sobre las pistas!
La vestimenta debe garantizar la óptima protección del snowboarder contra el frío, la lluvia y el viento. En este sentido, es recomendable el uso de fibras resistentes a la abrasión, transpirables y con un alto poder aislante.
Se debe llevar una primera capa compuesta una camiseta que estará en contacto directo con el cuerpo del esquiador, cuyo fin es mantener la piel seca y caliente. La segunda capa está formada de jerseys y forros polares, elaborados con fibras sintéticas derivadas del teflón expandido y del poliéster, que deberán poseer una gran capacidad aislante y termoreguladora. Esta prenda tiene que abrigarnos pero además debe seguir expulsando la humedad corporal al exterior. Y la tercera capa está compuesta por el mono, los pantalones y el anorak son prendas realizadas en diferentes capas que incorporan una membrana transpirable e impermeable, de forma que te resguarden perfectamente del mal tiempo.
En la imagen, las botas de la la línea The Seshat mantienen los pies ventilados a través de unas membranas internas que permiten la transpiración en su interior. Los guantes especiales, con tecnología climawarm, para protegerte del fuerte frío y mantener las manos calientes. Y por supuesto, imprescindibles para agarrarte a los palos que permiten deslizarte por las pronunciadas pendientes. Las gafas también son imprescindibles para evitar cualquier presión ocular.
Así que ya sabes, a la nieve hay que ir cool.
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