No hay nada como pasar un fin de semana con amigas para intercambiar secretos y productos de belleza. El momento make up previo a una cenita de verano da para mucho, e indagar en el neceser de maquillaje de tu mejor amiga significa que algún producto vas a descubrir. Y más cuando sabes que tu amiga es adicta a TikTok y te descubre los productos más virales del momento.
Y claro, algo saqué en claro tras cotillearle su bolsa de maquillaje. Ya puedo afirmar que mi último fichaje ha sido la sombra en barra de Clinique, y ya os confieso que no quiero otra. Además, os voy a contar algún truco que he probado y cuyo resultado me parece fantástico.
De toda la vida he utilizado las sombras tradicionales en polvo, y en alguna ocasión las líquidas (que también están bastante bien), pero después de probar las sombra en barra os aseguro que ya no quiero otras.
Se trata de la sombra de ojos doble en stick High Impact Shadow Play Shadow + Definer, con dos tonos y dos acabados que ahora os detallo. Su fijación es lo que más me ha gustado porque no se cuartea nada, y eso sin duda me ha encantado porque es lo que siempre he buscado, especialmente cuando tengo un evento de muchas horas. Pero hay más detalles que me han chiflado y tips que os cuento a continuación.
Siempre he sido muy fan de Clinique, ya os conté que llevo años utilizando su antiojeras, y ahora sus últimas sombras de ojos me han conquistado. Una original sombra de ojos en barra con dos tonos y dos acabados. En cada extremo del dúo presenta un tono distinto y una fórmula diferente: una sombra cremosa satinada y un polvo entre mate suave y brillo suave en otro tono.
Mi preferida es la parte donde está la sombra cremosa que se desliza suavemente dejando un color intenso de una sola pasada. Lo que hago es emplear la sombra en polvo mía habitual pero menos cantidad y encima la sombra compacta a modo de lápiz. Después difumino con el aplicador y queda un párpado perfecto y liso. Mi tono siempre es gris oscuro, así que he escogido el xxxxx que combina con la sombra en color crema. Hay diez combinaciones diferentes, así que elige la que más te encaje, todas adecuadas para ojos sensibles y se puede emplear con lentillas (yo llevo lentillas y sin problema).
La sombra en polvo en color crema es aterciopelada, muy suave, pero al ser clara la utilizo como iluminador y así le saco el máximo partido. Su precio en Primor es de 21,95 euros.
Hay disponibles 10 sombras diferentes, un total de 20 tonos, sometidos a pruebas de alergias y sin perfume.
Fotos | @colinocolino, Clinique
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