Una de las cosas más importantes cuando nos ponemos a dieta es intentar no pasar hambre. En muchas de las dietas que realizamos, la ingesta de alimentos se puede volver demasiado restrictiva, lo que nos haga sentir falta de saciedad constantemente y boicotee la dieta, dificultando que la sigamos en el tiempo. Es, por tanto, extremadamente importante, que busquemos una dieta saludable, equilibrada y segura que, además, no nos haga pasar hambre.
Solo de esta manera conseguiremos que la dieta deje de ser una dieta como tal y se convierta en un estilo de vida a largo plazo, que nos ayude a mantenernos en nuestro peso. Para ello, es muy importante que conozcamos cuáles son los alimentos más saludables e imprescindibles en cualquier dieta, que nos ayudarán a perder peso y, además, nos harán sentirnos saciadas. Gracias a ellos cuidarnos resultará mucho más sencillo y adquirir hábitos saludables casi inevitable.
Las verduras y frutas como base de la dieta
Si en algo están de acuerdo casi todas las dietas - y si no es así mejor huir de ellas sin mirar atrás - es en que las verduras y frutas deben ser parte esencial de nuestra alimentación. No solo son alimentos, normalmente, bajos en calorías, con aporte de azúcares saludables naturalmente presentes, minerales e infinidad de vitaminas, sino que son unos de los alimentos que más saciedad nos generan.
Esto se debe a que muchas de las verduras y frutas que comemos contienen grandes cantidades de fibra, proteínas y agua que influyen directamente en nuestra sensación de hambre. Entre las verduras y frutas más saciantes encontramos las batatas y las patatas, las coles, los deliciosos frutos rojos, el plátano, el aguacate, las verduras de hojas verdes como las espinacas o las naranjas. No será difícil incorporar estos alimentos a nuestra dieta con deliciosos pasteles saludables, salteados, o ensaladas.
Frutos secos y semillas entre otras y para acompañar nuestros platos
Los frutos secos son la opción ideal cuando tenemos hambre a media mañana o por la tarde y queremos picotear algo rápido. Con un pequeño puñado - que te quepa en el puño y puedas cerrarlo sin hacer trampa - conseguirás saciarte hasta la siguiente comida, de manera rápida e ingiriendo una de las grasas más saludables que podemos encontrar. Los frutos secos contienen mucha fibra y requieren masticación, lo que los vuelve muy saciantes, pero es importante controlar cuánto ingerimos si lo que buscamos es perder peso. En cualquier caso, con una ración pequeña harán desaparecer nuestro hambre.
Por otro lado, las semillas ayudan a reducir el índice glucémico lo que influye directamente en una disminución de la sensación de hambre. Los dos alimentos se pueden incluir en nuestra dieta como alimentos individuales o añadiéndolos a nuestras recetas. Algunas de mis favoritas son las galletas de calabaza y frutos secos (sorprendéntemente dulces), las barritas fitness, o en ensaladas.
Hacer uso de las legumbres
Las legumbres son las grandes abandonadas de muchas dietas. Es posible que se deba a que solo nos las imaginamos en cocidos y no resultan el plato más ligero ni bajo en calorías que podemos consumir. Sin embargo, las legumbres deberían formar parte de nuestra dieta, ya que gracias a su importante aporte de fibra facilitan la labor de las hormonas encargadas de calmar la sensación de hambre.
Incorporarlas a nuestra alimentación de manera ligera y saludable puede parecer un reto y, sin embargo, es mucho más sencillo de lo que parece. Podemos consumirlas en salteados, en diferentes ensaladas, guisadas con verduras o, incluso en originales tacos o albóndigas.
Huevo para controlar el apetito
Si todavía tememos a los huevos y procuramos evitarlos en la dieta, es hora de que dejemos de lado nuestros prejuicios y comiencen a formar parte de nuestra vida. Los huevos no solo son sanísimos, sino que gracias a sus grasas saludables y sus proteínas producen mucha saciedad. Tanto es así que ayuda a controlar nuestro apetito. Lo ideal es que procuremos evitar los fritos y nos decantemos por platos más saludables como las tortillas para el desayuno, los huevos rellenos con guacamole o los huevos poché.
La avena
Este cereal se ha puesto de moda en los últimos años y no es de extrañar. No solo nos permite sustituir a los tradicionales cereales azucarados de desayuno, utilizarlo como harina para evitar las harinas refinadas o elaborar infinidad de recetas, sino que es de lo más saludable. En concreto, la avena contiene grandes cantidades de fibra y proteínas, con muy pocas grasas, que ayuda a que nos sintamos saciados con facilidad.
Se trata, de hecho, de uno de los cereales más saciantes que podemos encontrar. La ventaja es que lo podemos añadir al desayuno en su forma normal sin tener que elaborarlo más, pero también podemos hacer infinidad de recetas con él. Podemos elaborar galletas, bizcochos variados, hamburguesas, sopas y mucho más.
La quinoa
La quinoa tiene un número importante de detractores y, sin embargo, se trata de un alimento muy saludable. En términos de saciedad, su aporte de proteínas y fibras ayuda a reducir la sensación de hambre. Igual que en el caso de la avena, la ventaja de este pseudocereal es que es muy versátil. Algunas de mis recetas preferidas son la ensalada de quinoa con ternera y aguacate o las hamburguesas de frijol y quinoa.
Todos los pescados, especialmente el azul
Cualquier tipo de pescado puede ayudarnos a mantener la sensación de hambre bien a raya gracias a su aporte de vitaminas. Sin embargo, los pescados azules son los que mejor lo consiguen gracias a sus altas cantidades de omega 3. La ventaja del pescado es que podemos elegir el que más nos guste y elaborarlo tal y cómo prefiramos. Al horno, a la plancha o incluso en albóndigas o tacos , se trata de un alimento sanísimo.
Imágenes: Vitónica, @health.mi.foodie, Directo al Paladar, @tantaveggie
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